Título: AtomkaAutor: Franck ThilliezEditorial: Destino, 2013.Páginas: 560.
Resumen oficial.
A pocos días de Navidad, un suceso de gran envergadura irrumpe en las vidas de Lucie Hennebelle y Franck Sharko, policías de la famosa sección criminal del número 36 del Quai des Orfèvres. Aparece el cadáver de Christophe Gamblin, periodista de sucesos, encerrado en el congelador de su casa y su compañera desaparece mientras llevaba a cabo una serie de entrevistas sobre un caso explosivo del que nadie conoce los detalles. La única huella que parece haber dejado es su nombre garabateado en un papel que conserva un niño vagabundo y muy enfermo.
Al mismo tiempo, un antiguo caso de mujeres secuestradas vuelve a salir a la superficie: víctimas arrojadas vivas pero inconscientes a lagos prácticamente congelados, y rescatadas in extremis gracias a varias llamadas anónimas a la policía.
Las señales de un asesino brutal obsesionado con la hipotermia arrastrarán a Lucie y a Sharko hacia la zona prohibida de un lugar aterrador y devastado.
Mientras la investigación se acelera, Sharko se enfrenta a viejos demonios que le conducirán a un duelo secreto y cruel que le irá destruyendo.
Impresión personal.
Atomka es la tercera novela de Franck Thilliez protagonizada por Franck Sharko y Lucie Henebelle, siendo las dos primeras El Síndrome E y Gataca. Previas a estas dos novelas, Thilliez escribió El Angel rojo y Luto de miel que son dos novelas donde sólo aparece Sharko. Quien vaya a comenzar a leer la serie de estos policías, le recomiendo que, aunque los libros son autoconclusivos en cada uno de los casos, es de esas novelas que es mejor leerlas por orden porque los personajes van evolucionando mucho desde que los conocemos, seguramente más que cualquier otro equipo de policías. Para entender muchas de las cosas que les pasan o por las que pasan es necesario saber que les ha ocurrido a cada uno de los dos previamente. De esta forma, es más sencillo comprenderlos e identificarse, en muchos casos, con su situación, incluso, como me pasa a mi, "quererlos". Y es que considero que fundamentalmente hay dos cuestiones que yo resaltaría de las novelas de Thilliez: por un lado, estos dos personajes que a mi personalmente me encantan y, por otro, unas tramas muy trabajadas, muy documentadas, muy críticas por la realidad de que van impregnadas y perfectamente hilvanadas.
Y lo mejor de todo es que Thilliez no nos engaña. Vamos junto con Sharko y Lucie recorriendo el camino de la investigación, sin trampas. Abrimos la boca de asombro no por la sorpresa inesperada sino por la evidencia de lo que los dos policías van descubriendo. Te asombra que exista tanto mal, pero te asombra además que ese mal sea posible. Un desenlace perfecto para una investigación perfecta en un mundo imperfecto donde los malos son realmente malos y sólo deseas que no sea posible que exista lo que la novela plantea.
En conclusión, como las anteriores, ni mejor ni peor, igualmente impresionante en el sentido más amplio de la palabra. Adictiva y con un ritmo vertiginoso. Unos personajes con los que quiero seguir coincidiendo y que no me falten.