Isner marcó diferencias gracias a su mejor arma: el servicio. Ganó 38 de los 42 puntos que disputó con el primer saque (90%), 14 de 22 con el segundo, consiguió 22 aces y sólo cometió una doble falta.
Rochus, en cambio, tuvo bastante problema con su juego de servicio y cedió diez chances de quiebre. Al norteamericano le faltó decisión a la hora de quebrar y sólo concretó un break point. Pero con eso le bastó para llevarse el primer parcial y, luego, se adueñó de un segundo set más parejo en el tie break.
Isner consiguió así el segundo título de su carrera profesional, el primero sobre césped. El anterior lo había ganado en Auckland el año pasado. Es la primera vez en los 36 años de historia del torneo que el primer sembrado se corona campeón sobre el césped de Newport.
Cuadro de singles de Newport
Foto: Página Oficial del Torneo