Según Ulrich Hackenberg, miembro del consejo para el desarrollo técnico de Audi, “El Audi RS 7, es una muestra de las habilidades que presenta nuestro equipo de desarrollo con respecto a la conducción autónoma, la precisión y el buen rendimiento, seguirán siendo los valores que caracterizarán nuestros futuros pasos de desarrollo”.
Para lograr orientarse dentro de la pista, el carro utilizó señales GPS y los datos se transmitieron al vehículo por WiFi. Además, cámaras 3D fueron puestas en el vehículo para filmar la pista, y un programa fue el encargado de comparar la imagen que mostraban las cámaras con un conjunto de datos almacenados a bordo. Esto hizo posible que el Audi RS7 pudiera orientarse centímetro por centímetro dentro de la pista.
La conducción autónoma, es uno de los campos de desarrollo más importantes que presenta Audi, ya son 10 años desde la primera vez que se vieron avances en esta área. Los resultados que se obtienen de pruebas como la que se realizó durante la final del DTM, son cruciales para seguir evolucionando en el campo de las funciones automáticas de los carros.
Los sistemas de asistencia al conductor que presentan los distintos modelos de la marca, hacen que la conducción sea un proceso más sencillo y controlado. Los más altos niveles de desarrollo en este campo se pueden observar también en el Audi A6, donde se encuentran sistemas de ayuda como el Audi side assist, el Audi Active Lane Assist y el adaptive cruise con función Stop & Go.
Los expertos de Volkswagen Group Research, el Laboratorio de Investigación Electrónica (ERL) y la Universidad de Stanford (ambas en California), están apoyando a Audi como socios en el desarrollo de los sistemas tripulados.