Cuando has cumplimentado una temporada entera con tu equipo y has tenido todo un periodo transitorio para planificar la siguiente, te ciñes en estudiar todo, errores puntuales o estructurales, confección de plantilla, perfil de jugadores que has de traer para completar el equipo, estudio de rivales...
Presuponiendo que en nuestro caso las bases estaban sentadas en todos los ámbitos, hemos echado a andar esta nueva campaña con el convencimiento de que la pre-temporada sería tiempo suficiente para alcanzar la velocidad de crucero que nos permitiera hacer un buen comienzo de competición y así llenar la bolsa de oxígeno para el cómputo total de la misma.
Nuestra pre-temporada ha ido bien, todo según lo guionizado (sólo con el lastre de 3 jugadores lesionados para medio plazo). Nos ha dado tiempo de prepararnos como hemos deseado y tomar buenas sensaciones en los partidos de preparación.
Una vez llegada la competición hemos encontrado un primer rival en nuestro campo como Villafranco que nos ha superado y "extrañamente" nuestra respuesta competitiva ha sido insuficiente.
Tras una buena semana de entrenos y bajo la conjura que lo de la 1ª jornada pudo ser un mal día hemos acudido al tortuoso césped natural de Mairena del Alcor para afrontar un partido con muchas connotaciones (primer partido fuera, terreno de juego...) esperando una respuesta contundente en cuanto a la claridad buscada de nuestro juego.
Hemos entrado muy bien al campo, mandando, controlando, como había que hacerlo pero sin pisar el acelerador cerca de portería.
En la primera llegada rival al área, m.20, a balón parado nos han marcado un gol que entra llorando en nuestra portería; 1-0. A partir de ahí, con un fútbol más insistente que estructurado y más agresivo en la búsqueda de la portería rival hemos empatado 1-1, incluso nuestro segundo gol se nos escapó en varias ocasiones bastante claras.
Nos sobraba el descanso porque queríamos entrar y finiquitar. Volvimos a tener varias jugadas claras para adelantarnos en el marcador pero un nuevo error puntual de concentración hizo que sirviéramos en bandeja el 2-1 local, en su segunda llegada a nuestra área.
Los minutos finales fueron de empuje, evidentemente, nuestro para no encontrar ninguna recompensa.
Para el espectador que pudo ver el partido resulta increíble que Mairena ganara este partido, para nosotros no porque ya somos reincidentes en estas lides.
He de decir que toda una preparación de muchos días evidentemente no te va a hacer ganar los partidos si no cuentas con el acierto de ese día de la competición pero sí es cierto que esperaba que ayudara a estar cerca.
En cualquier caso, lo que nunca imaginaba que después de ya dos partidos disputados nuestro bagaje fuera de 0 de 6 y un despliegue del juego no claro y lejos de estar asentado.
La temporada anterior fuimos Doctor Jeckyl y Mr. Hyde, contrastábamos partidos increíbles en nuestro campo, con porte de casi invencible con actuaciones desastrosas, incontrolables y desconocidas fuera de nuestro campo. Esta temporada tenemos un mejor y más completo equipo para afrontar una competición que premia la regularidad y que castiga duramente las dudas y la inconsistencia.
Con todo, hay algo flagrante, después de dos partidos, AÚN NO ESTAMOS.
Nos queda apretarnos más y encontrarnos todos YA si no queremos nadar contracorriente e ir a remolque.
Confiamos ciegamente en nuestras posibilidades y las de todos nuestros jugadores pero el tiempo apremia y el potencial hay que convertirlo en acto inmediatamente.