Aunque pasen las de caín

Publicado el 12 marzo 2014 por Carlos Romero @CarlosRomeroSFC

Honor, sentimientos que no comprenden más que ellos, humildad y “virtudes” parecidas, son loables mientras habiten a la sombra del grande. Solo les bastará sacar la cabeza un poco, como la temporada pasada, como para viajar en Audi a todo tren mirando por encima del hombro a todo bicho viviente que se mueva y revertir los roles.

La humildad se convierte en soberbia, el sentimiento en prepotencia, y el honor en vileza.

Es condición futbolística particular de la mitad de esta ciudad vivir de esas virtudes cuando no se tienen campeonatos que airear, y aferrarse como si la vida les fuese en ello, a niñas que gritan “viva el betih, que te pone un nudo en la garganta que no se pue aguantá, compare”; así como ranas Gustavo, da igual, su mundo es un mundo de Muppets.

Pero como todo ocurre en la historia, todo vuelve a su sitio. Ser reina por un día (entiéndase temporada pasada) como excepción que confirma la regla del equipo que siempre estuvo por detrás, y los llantos de los que no pueden evitar lo que es cíclico. Esto es el más que probable segundazo, para adelantar con ello al Murcia como el equipo que más veces descendió a Segunda División, y será, el verdiblanco, probablemente el que más veces habitó en el farolillo rojo de Primera, que no podía ser de otro color más que rojo para mayor escarnio. En alguna estadística tendrían que adelantarnos.

En toda esta vorágine de desesperación inducida, como si de un coma se tratase,  e inevitable que forma parte del ser que defiende lo verde,  producida indudablemente por una idiosincrasia de pandereta, se les presenta una nueva oportunidad. Siempre tienen esa nueva oportunidad, que si bien es inevitable que bajen las veces que hagan falta por mor del karma, no es menos cierto que oportunidades tienen a punta pala desde que el balompié comenzó a llamarse así en esta ciudad.

La propaganda de lo que alguien bautizó como “la lechuga mediática” se pone en movimiento como un rodillo indefectiblemente. Se preguntan, a modo de insulto a nuestra inteligencia, qué equipo es el favorito. No importa en qué situación esté el eterno segundo equipo de la ciudad, que las distancias por arte de magia se habrán reducido, hasta el punto en que incluso serán algo superiores debido a esa ave mitológica que algunos llaman el “pájaro feliz” que simboliza su afición, muy superior a la de sienes de equipos, no solo en España, sin en el mundo, valga la obviedad, para la lechuga mediática el favorito no está definido. Igual no tendrían duda a la hora de discernir quién era el favorito entre Valladolid y FC Barcelona, sin darse cuenta que pase lo que pase el FC Barcelona lo seguirá siendo.

Estas cosas no ocurren con otros clubes en España donde cada cual está en el sitio que le corresponde, si el Betis está donde está siempre es culpa de alguien, nunca tienen la responsabilidad. Cuando no son los sevilistas fascistas, serán los árbitros que les quitan los puntos para que bajen, o la culpa será de donmanué, un personaje que se quedó con el Betis por la cara y que ellos nunca quisieron. O seguramente será porque alguien les tienen manía por ser pobres y simpáticos.

Ya no hay peligro de segundazo, todo el mundo sabe que en los “derbis” todo puede pasar, que estos partidos son especiales, que la igualdad es extrema y lo de la Liga no deja de ser una anécdota aislada, como si de una especie de lunar se tratase que debe extirparse para que no manche la gloria inmaculada, que si usted no la ve será porque sea tonto, porque gloria tienen y mucha,  así que mejor que no pregunte por ella, es un dogma de fe.

Ya no importa que los goleásemos más de diez veces por 5 o más chicharitos a lo largo de la Historia, ni que tengan un ranking UEFA ridículo frente al Sevilla FC, ni que no tengan ni la mitad de partidos jugados en Europa que nosotros; ni que se hallen a años luz en la clasificación histórica de la Liga; que no se fijen en la diferencia de 24 títulos oficiales entre un club y otro… eso son cosas de los palanganas que viven en el pasado, como si los títulos no los ostentásemos actualmente.

Ellos fenecerán probablemente porque los paragüeros de IKEA están devaluados y no se interesan en esas cosas de chcichinabo, tan solo en cosas grandes como el sentimiento, el honor,  llenar el campo más que los palanganas o ser más en el peiperviu es algo al alcance de muy pocos y mucho mejor, dónde va usted a parar.

Tan solo tienen una premisa a su favor y que también se repite cíclicamente: ser los primeros en ganar algo aunque lo pierdan después para siempre. Y esta primera eliminatoria producida en Europa por primera vez escama un poco, esperemos que en este caso la historia se equivoque.

Se marcharán a Segunda intentando echar la mano al cuello al hermano, pero no se podría esperar menos de Caín, ¿verdad? que no sería Caín si no tuviese siempre presta la quijada de asno para lanzarla.