Hace muchos años en regulación en Cuba estipulaba que solo las residencias diplomáticas o consulares podían tener en sus áreas estatuas que representaran leones. Aunque la autenticidad de este documento pueda ser dudosa muy pocos se aventuraron a colocar esculturas de este tipo en sus casas. Durante décadas solo el Consulado Inglés se acogió a esta regulación y gracias a esto hay todavía en Cienfuegos una casa con leones.
Más que “una casa con leones” es la Casa de los Leones, porque ya está reconocida nacionalmente así.
Para todos es llamativa esa morada ubicada en el Prado, entre las avenidas Santa Cruz y Santa Elena, con sus dos leones de hierro fundido custodiando la entrada y su portal a más de 4 metros de altura sobre la calle. Muchos caminantes se fijan en la fachada y algún que otro curioso se asoma por la puerta para ver su interior. Pero lo más importante son los leones, eso que ahora están siendo restaurados.