Baby Led Weaning o alimentación complementaria a demanda

Por Pequelia @pequelia

Hay bebés que no muestran ningún interés por la comida sólida, los padres les ponen delante todo tipo de alimentos en un plato pero apenas los prueban, una fresa, un trocito de pollo, un trocito de pera… los huelen, los chupan, los apartan, quizá dan algún bocadito, pero terminan rechazando los alimentos. Se alimentan con lactancia materna o leche de fórmula y papillas a pesar de haber cumplido 18-20 meses, nada que ver con otros bebés que sin haber cumplido el año devoran todo lo que dejan a su alcance.

Un bebé al que le cuesta llevarse comida a la boca, posiblemente no esté muy preparado para comerla, por eso es importante dejar que evolucionen a su ritmo y evitar la tentación de forzarle a comer alimentos sólidos. El desarrollo de las distintas habilidades que están implicadas en el acto de comer es lo que facilitará que terminen comiendo alimentos sólidos, reduciendo de forma significativa el riesgo de sufrir un ahogamiento. Es interesante, en los casos en los que el bebé tarda en experimentar con los alimentos sólidos, que sigamos las reglas del Baby Led Weaning o alimentación complementaria a demanda.
La alimentación con sólidos brinda al bebé la oportunidad de descubrir lo que la comida le puede ofrecer, de hecho, el acto de comer es parte del proceso de exploración del mundo que le rodea. Un bebé tiene deseos de explorar, experimentar e imitar a los adultos, los padres pueden ayudarle permitiendo que sea él quien establezca el ritmo de las comidas, es preferible utilizar el juego y la exploración, que el propio acto de comer, de este modo la transición hacia las comidas sólidas se desarrollará de una manera más natural y se consolidará mejor. El cambio resultará sencillo porque la motivación del bebé para avanzar en este proceso no es precisamente el hambre, sino la curiosidad.

En el blog Un papá en prácticas podemos conocer la experiencia de un padre con la introducción de la alimentación complementaria en la dieta de su pequeña. Según explica, su bebé tardó varios meses en tener interés por la comida, cada día le ofrecían platos con diferentes alimentos, pero apenas comía, jugaba con ellos, los olía y quizá les daba un pequeño mordisquito, pero nada más. A los 18 meses, justo un año después de iniciar la alimentación complementaria, el bebé seguía con la misma actitud, apenas tomaba bocados sólidos, el padre explica que a veces tenía un apetito desmesurado y en ocasiones parecía estar en huelga de hambre.

Lógicamente, y a pesar de que el bebé gozaba de buena salud, los padres empezaron a preocuparse, dada la edad y la imposibilidad de que comiera más de un bocado seguido. El padre consultó al nutricionista Julio Basulto sobre el tema, tras comentarle la situación y explicarle que apenas comía y además que dormía poco, el experto le comentó que no tenían por qué preocuparse, principalmente porque el bebé estaba activo y sano, así que ya comería más cuando lo necesitara.

Pues bien, los padres siguieron la recomendación, y fue cuando cumplió los 27 meses cuando de repente se activó el “gen alimenticio”, la pequeña empezó a comer de una manera que sorprendió a los padres. Comía de su plato y del de los demás miembros de la familia, como si tuviera que recuperar el tiempo perdido. El padre comenta que la paciencia ha sido un factor muy importante, gracias al Baby Led Weaning y a haber dejado que fuera a su ritmo, sin forzarla y confiando en ella, se produjo el cambio.

Este es un problema que sufren algunos bebés y los padres no deben preocuparse si rechaza los sólidos y prefiere la lactancia y la papilla. Hay que seguir ofreciéndole alimentos y pensar que se trata de un juego sin pensar en la cantidad que come, poco a poco se producirá el cambio y empezará a comer todo tipo de alimentos sólidos. Merece la pena destacar que no es necesario que los momentos de la comida coincidan con las tomas de leche materna, hay que pensar que lactancia y la alimentación complementaria son dos actividades diferentes, de este modo el proceso será más relajado y permitirá que las experiencias con la comida sólida sean más agradables para los bebés y para los padres.

Sobre la alimentación complementaria a demanda hay mucho que hablar, tenemos la intención de profundizar en el tema sabiendo que será de gran ayuda para muchos padres.

Foto | Lars Plougmann

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