Ingredientes
- 4 trozos de bacalao desalado
- 4 huevos
- 50 grs. de copos de puré de patata
- 150 ml. de leche
- 150 ml. de agua
- 1 cucharadita de mantequilla
- harina
- aceite
- sal
Ponéis la leche y el agua a calentar en un cazo, añadís la mantequilla y una pizca de sal. En cuanto arranque el hervor apagáis el fuego, incorporáis los copos de patata y removéis.
Para hacer los huevos poché va muy bien usar un utensilio específico para ello. Hemos utilizado el de la foto.
Colocáis una cazuela con un dedo de agua, cuando hierva introducís el molde para los huevos, engrasado con mantequilla y con los huevos ya instalados en él. El fuego medio-alto. En 5 minutos estarán listos. Quedan redonditos, perfectos.
Si no tenéis la ayudita del molde, no hay problema. Otra técnica: ponéis una olla con agua, añadís un chorro de vinagre y cuando comience el hervor, echáis los huevos (aquí es buena idea cascarlos en una tacita, así os aseguráis no echar ningún huevo con la yema rota) Los sacáis con una espumadera. No quedan tan perfectos de aspecto, pero si igual de buenos. Reserváis.
Los trozos de bacalao conviene secarlos un poco con papel absorbente. Los pasáis por harina y en una sartén con aceite, los freís.
Cuando sirváis este plato, en el último momento lo rociáis con un hilillo de aceite de oliva virgen. Y a disfrutar del mar y la tierra.