Bacalao confitado al azafrán y crema de gorgonzola

Por Alba82


Hace unas semanas comí un plato similar a este en La Crema Canela, un Restaurante, con una oferta culinaria de temporada y muy variada, situado en uno de los pasajes anexos a la Plaza Real de Barcelona.
Las aficionadas a la cocina solemos dar un toque personal a cada cosa que cocinamos, es algo que no podemos evitar. Así que una vez manos a la obra tuve la tentación de añadir unos piñones a la salsa de queso y tengo que decir que estaba genial. Son prescindibles, pero si los tenéis no dejéis de añadirlos
He preferido una presentación minimalista, como las que sirven en los bistró, porque creo que es como mejor se disfruta. El pescado se trocea en el mismo cuenco y éste se impregna del sabor de la salsa. Mmmm, para morirse de bueno...
No le queda mal unas mini tostaditas como acompañamiento.
¿Pescado y queso no es una combinación perfecta? Probadla, y luego ya me contaréis...
Ingredientes para cuatro personas
4 trozos de lomo de bacalao en taco (200 g cada uno)150 g de queso gorgonzola250 ml de leche evaporada1 puerro medianoLecheAceite de olivaAzafrán en polvoPimienta blanca1/2 cabeza de ajos Hilos de chili
Piñones (opcional)Sal
Es mejor preparar antes la salsa para que vaya cogiendo sabor y textura.
Trocear la parte blanca del puerro y pochar a fuego muy lento en un poco de aceite de oliva. Es preferible que no coja color.
Añadir la leche evaporada y triturar hasta que se convierta en una crema fina. Pasad por el chino si lo veis necesario. Condimentar con pimienta blanca. 
Añadir el queso troceado. Poned el cazo sobre el fuego a baja temperatura. Removed sin parar con las varillas hasta que todo el queso se haya fundido. No creo que sea necesario diluir la salsa, pero si tenéis necesidad de hacerlo, añadir un poco de leche. Rectificad de sal al final, una vez incorporado el queso.
Si queréis añadir piñones, tostadlos antes en una sartén sin aceite.
Cortar unos ajos a láminas y sofreir. Reservar escurridos.
Confitado del bacalao:
Verted aceite en una cazuela donde quepan los cuatro trozos de bacalao sin que sobre mucho espacio entre ellos. La cantidad dependerá del grosor del pescado. Lo ideal es que lo cubra por entero.
El aceite debe estar caliente pero no debe hervir durante el proceso del cocinado del pescado. Es recomendable usar un fuego eléctrico, o la vitrocerámica, para poder controlar la temperatura y que ésta se mantenga entre 60º y 80º de temperatura. 
Pelar tres o cuatro ajos y echadlos a la cazuela, en crudo, para que se vaya aromatizando el aceite a medida que éste se va calentando. 
Existen termómetros para medir el calor, pero si no disponéis de ninguno simplemente acercad la palma de la mano a la boca de la cazuela (sin tocar la superficie) y si notáis gran calor y el aceite tiembla un poco, es que la temperatura ya es aceptable.
Colocad en el fondo de la cazuela los lomos de bacalao con cuidado, procurando que no se toquen uno al otro.
Una vez hayáis introducido el pescado en el aceite retiradlo del fuego. Tardará unos veinte minutos a una hora a que las lascas del pescado se abran, señal de que ya estará confitado.De nuevo todo dependerá del grosor de los lomos. A continuación retiradlo de la cazuela y escurrid los trozos encima de algún papel secante de cocina.
Recordad calentad de nuevo el aceite (sin que hierva) antes de sacar el pescado. También se puede calentar en el microondas o en el horno. Siempre el tiempo justo para que no se seque.
Y no tiene más historia.
Servidlo inmediatamente sobre la crema de gorgonzola caliente, las láminas de ajo, y los hilos de chili por encima.
Proceso de desalado del bacalao.

¡A disfrutar!