Opinión personal:Escribo esta reseña bajo un halo de confusión en el que no he podido evitar caer después de leer esta novela. Bajo la misma estrella ha sido un libro que me ha gustado y me ha entristecido a partes iguales. Me ha emocionado de tal modo, que tan pronto sonreía como una triste y solitaria lágrima se me escapaba de los ojos. No sé si encontraré las palabras adecuadas y necesarias para describir lo que esta novela me ha transmitido. Tampoco estoy segura de si esta será una buena reseña, donde plasmaré claramente mis ideas o será algo confuso y sin sentido, pero intentaré hacerlo lo mejor posible.
Tanto Hazel Grace Lancaster como Augustus Waters sufren cáncer. Hazel tiene metástasis en los pulmones y Gus sufrió osteosarcoma. Ambos se conocen en una sesión del grupo de apoyo, cuando Gus acompañó a su amigo Isaac, momento en que sus caminos se unen y así permanecen hasta el final de la historia.
Aunque los protagonistas saben perfectamente cuál es su situación, al igual que todas las personas de su ambiente, no pierden la esperanza ni las ganas de vivir; son coscientes de su enfermedad y tienen su particular forma de verla y definirla, pero no permiten que ésta les robe sus sueños.Y es que los personajes son el punto fuerte de esta magnífica historia. Son tan reales y cercanos que se les coge cariño desde el principio. Están todos muy bien definidos y construidos, son fuertes, alentadores y maravillosos.
Algunas veces lees un libro, sientes un extraño afán evangelizador y estás convencido de que este desastrado mundo no se recuperará hasta que todos los seres humanos lo lean. Y luego están los libros como Un dolor imperial, de los que no puedes hablar con nadie, libros tan especiales, escasos y tuyos que revelar el cariño que les tienes parece una traición.
La trama no cuenta con acción, misterio o elementos fantasiosos, pero no le hace falta ninguno de estos para llegar por completo a lo más profundo del corazón del lector. Es una historia dura, triste y dolorosa, a la vez que muy alentadora pero, sobre todo, es realista de principio a fin.Es una historia que te enseña a ver la vida de otra manera, que cambia por completo tu visión sobre el mundo, que te hace recapacitar, descubrir y valorar lo que tienes y lo que a otras personas les falta. De una forma tan sublime y sencilla, John Green manda un mensaje tan positivo a través de una historia tan triste, que solo puedo definir a esta novela como sublime.
He disfrutado de principio a fin del libro en sí, pero sobre todo del romance que surge a lo largo de sus páginas de forma pausada. Un romance que se degusta en cada uno de sus diálogos y de sus palabras, con frases impactantes que me han dejado sin aliento, me han encogido el corazón e incluso han hecho que en algún momento me sintiera muy pequeñita e insignificante. Un amor tierno y real entre dos personas mucho más que fantásticas y valientes, que recordaré siempre con muchísimo cariño.
Parecía una eternidad, como si hubiéramos estado juntos una breve pero infinita eternidad. Hay infinitos más grandes que otros infinitos.
***
No puedes elegir si van a hacerte daño en este mundo, pero sí eliges quién te lo hace. Me gustan mis elecciones. Y espero que a ella le gusten las suyas.
John Green cuenta con una pluma magistral y sabe cómo ganarse al lector. Su estilo es sencillo pero deslumbrante, con diálogos agudos que tan pronto te arrancan una carcajada como te hacen llorar por la verdad de sus palabras y lo que éstas implican. Y aunque la historia puede resultar de lo más sencilla, es imposible soltar el libro una vez que lo has empezado, porque querrás saber más sobre Hazel y Gus, sobre sus vidas, sobre su enfermedad y sobre su final.
Y el final es lo que más me ha impactado. Aún no termino de creérmelo, ha sido algo totalmente inesperado y sigo en estado de estupefacción. Aunque no puedo evitar la tristeza que me causa, no puedo negar que me ha parecido un final de diez y que es la mejor forma de acabar la novela.
Bajo la misma estrella consigue encoger y llegar al corazón de lector. Una historia emotiva, realista, desgarradora, alentadora y única imposible de olvidar.
Puntuación: