Tengo que reconocer que soy una enamorada de la repostería oriental. En los mercados medievales siempre busco dos cosas los dulces árabes y los bollitos preñados. Me encanta esos dulces con sabor a almendras nueces y miel. Por ese mismo motivo que buscando alguna receta de ese tipo me encontré con estos deliciosos Baklawa. Este dulce está muy extendido y como ya comenté se consume en países Árabes, Turquía, Grecia e incluso en India. Existen muchas versiones, según el país y la región. Originalmente se utiliza la pasta filo, pero lo he tuneado un poco y utilicé masa de hojaldre, igualmente están buenísimos.
- Descongelar la masa de hojaldre.
- Derretir la mantequilla.
- Mezclamos en un bol los frutos secos con el pan rallado, la canela, el clavo y el azúcar (5 cucharadas).
- Untamos un molde cuadrado o rectangular con mantequilla.
- Extendemos la masa de hojaldre y pondremos dos láminas en el fondo del molde. Extendemos mantequilla sobre la misma.
- Encima pondremos la mezcla de frutos secos y aplastamos bien. Colocamos otras dos laminas y repetimos la operación anterior.
- Cubrimos con una lámina de hojaldre, volvemos a extender mantequilla y introducimos al horno unos 60 minutos (según horno).
- Mientras en un cazo pondremos 1/4 de agua, el resto de azúcar, la miel, el zumo de limón y la ralladura.
- Llevamos a ebullición durante 10 minutos o hasta obtener un almíbar ligero.
- Sacamos del horno los pastelitos y aún caliente vertemos el almíbar.
- Dejamos no menos de 4 horas antes de consumir.