Bar de cejas Benefit

Por Ladymad @MaquillajeAdict

Hola guapas y guapos!

Hoy os traigo una entrada que llevaba tiempo queriendo hacer y que, por fin hoy, cuando todo el mundo duerme a mi alrededor (mininos incluidos ^o^), voy a poder contaros. Ocurrió hace algunas semanas (incluso íbamos en manga corta, mire usted, con el frío tan tremendo que hace ya!) y no es una entrada en la que yo sea la protagonista, pero sí os quería contar cómo fue y qué opino.

Como os decía, hace algunas semanas mi aguerrida compañera de fatigas y sin embargo casi amiga ya, Mavi y yo nos fuimos al que por ahora es nuestro stand preferido dentro del Corte Inglés y no porque den bombones de chocolate cuando compras algo, que también sería buena idea, por cierto, sino porque nos sentimos bien atendidas, las niñas son muy amables y cuando nos aconsejan, no sentimos que lo hagan para vendernos nada. Estoy hablando, claro, del stand de Benefit.

Como sabéis, además de los productos tan cucos que tiene la firma, te ofrecen un pequeño Bar en el que poder arreglarte cejas y zona del “moustache” o bigotillo. Pues bien, allá que cogí a mi incansable compañera y la sometí sin piedad alguna al tratamiento para ver sus efectos. No porque yo no quisiera hacerlo sino porque, por recomendación de mi esteticista y de las propias “niñas” de Benefit, era mejor que me dejase las cejas quietas a ver si así, mis tímidos pelillos terminan por salir y rellenar esas praderas llanas por donde ha debido de pasar Atila porque ya no crece la hierba ni el pelo tampoco. Así que, en esta ocasión, el conejillo de indias fue Mavi.

No seré yo la que diga que a Mavi le hacía falta un buen retoque de cejas, que ella ya es bien mona y no necesita nada de nada. Pero cuando la tortura finalizó, la verdad es que tuve que preguntarle a aquella señorita taaaaaan mona dónde se había metido mi compañerita, porque no parecía ella misma. Todo esto fue gracias a nuestro pequeño y grácil angelote llamado Vanessa, que además de depilarle las cejas le hizo un maquillaje semi-express y la dejó re-monísima, lista para irnos de cañas y buscar un plan en una tarde de jueves cualquiera.

Y ahora, sin más dilación al meollo, que en el fondo sé que es lo que quieren todas

Cuando llegamos, Vanessa preparó la cera caliente mientras dibujaba el perfil de la ceja que, según el nacimiento de la misma y el rostro de la susodicha, era el perfil perfecto para ser una persona y no un uniceja cualquiera. En este caso, tanto el arco como el grosor, el principio y el final, estaban más o menos bien definidos y no hubo que llamar a Lourdes para que obrara ningún milagro, con lo que, el trabajo, fue más o menos sencillo.

Una vez dibujada la ceja, primero se depila el entrecejo y la parte superior con cera suave caliente. Y recalco: suave!! Este me parece un punto muy importante porque, si utilizamos cera normal en esa zona, al ser una zona en la que la piel es más fina que en el resto del rostro, corremos el riesgo de, con un uso continuado, acabar descolgando la piel y eso no está bien ni queda bonito, por Dior!! Bueno, como iba diciendo, depilan el entrecejo y la zona superior y, con unas tijeritas, cortan los pelitos para dar la forma deseada a la ceja. Una vez la clienta está de acuerdo y se ve re-mona en el espejo, se procede a retirar la parte interior de la ceja, la que limita con el párpado fijo o superior del ojo, previamente saneada con unas pincillas.

Et Voilà! Tus cejas y tu os habéis reconciliado y ya no pareces un uniceja sino una personita re-mona.

El proceso es fácil y os puedo asegurar que no duele. Yo me sometí voluntariamente a la retirada del entrecejo y la parte superior que, todo hay que decirlo, las tenía algo descuidadas con eso de animar a los pelillos a que afloren cuales margaritas en la vera en el mes de Mayo y tengo que decir que la expresión de mi querido rostro cambió sustancialmente. Si es que unas cejas bien depiladas son muy importantes!

En fin, terminado el proceso, como os dije antes, Vanessa se empleó a fondo con Mavi y le fue probando productos al tiempo que la dejaba re-mona (lo he dicho ya?) y este es el resultado final.

Ah! Se me olvidaba mencionar que el coste total fue de 21 €!! Si, fue un susto, lo reconozco, pero viendo lo monas que nos dejaron y que no he tenido que tocar las pinzas todavía, creo que mereció la pena probarlo,¿no creéis?

El antes:

El  después:

Y por fin, maquilladita, mostrando su perfil bueno, jiji ;P: