La decoración del local es muy normalita, típica de bar de barrio. Pocos elementos chinos por no decir ninguno. La atención es muy correcta. Sirven pronto, y bien. La comida, muy recomendable. Las empanadillas kuo tie son dignas de un restaurante de categoría. Quizá lo más llamativo sean los rollitos, que no están cubiertos por esa masa aceitosa habitual de otros restaurantes de comida china, si no que es una masa fina, más parecida a la masa filo, hecha al vapor. El resultado, unos rollitos diferentes y que nos gustaron mucho. Los precios, ¡qué decir!. El rollito blanco, 1, 90 euros. En su página de facebook podéis ver la carta.
Vamos con las notas:Comida: 8,5Servicio: 9Decoración:5Calidad/Precio: 9.5