Claro, no era extraño ver en determinados muros del amplio y heterogeneo espacio kernerista posteos relacionados a Baradel en una foto con Massa. Son en estos momentos cuando a Barthes se le volarían las chapas y las croissants si viera con qué soltura y arbitrariedad analizamos una foto.
Desde este blog no se trató seriamente el tema del paro docente, aunque tenga una postura que es la misma que tenía cuando daba clases en determinados colegios de La Matanza: no adherir a los paros, tomarlo como ultima medida de fuerza. Ahora, largas discusiones he tenido y muchos comentarios certeros me empezaron a torcer el brazo en algunas posturas mías bastante "facilistas" por mi parte quizás porque considero que tantos médicos como docentes ante todo cumplen una función social determinante y por otro lado determinadas medidas fuerzas no hacen más que deteriorar y desprestigiar a la educación pública bastante baqueteada sobretodo por la sobreprotección del Estado hacia las escuelas privadas. En torno a esto, hay algo que es cierto: hasta no hace mucho tiempo, a la privada (salvo algunas importantes) iban los pibes que no podían pasar de año en la escuela pública, eso demostraba el grado de excelencia y de reconocimiento que tenía la enseñanza pública. Pero la culpa no es del chancho sino de quién le da de comer. El Estado, en este caso, provincial es responsable de la situación actual.
Ayer aparecía Baradel como invitado en el programa "All is quiet in the kernerest front" 678 y tuvo muchos argumentos que me hicieron cambiar mucho de parecer en determinadas cosas que por preconceptos y prejuicios personales los tomaba como certeros. Creo que la posición de la postura del baradelismo "apostar a la profundización", o sea reconocer que las políticas macro en cuestión educativa realizadas por el gobierno nacional son la sintesis también de la lucha de los docentes que para fines del siglo XX se ocupaban de darles de comer a los pibes por la crisis social, en lugar de realizar su histórica labor de enseñar y por eso mismo luchar y marcar aquellas cuestiones que no contribuyen a fortalecer la educación pública.
A lo largo de este eterno conflicto, escuché y leí que le hacían el juego al massismo. Ahora, 678 mediante, dicen que es evidente que el kernerismo respalda a la lucha docente para deteriorar a Scioli. La Política Rosquera Online hace esa interpretación a partir de cómo lo trató el equipo ultratodoestábien del programa a Baradel. Una lectura un tanto simplona y si es así la jugada, poco cambia la perspectiva a nivel general, porque los que miran ese programa son ultraK y no precisamente la gran mayoría de los argentinos que en cada informe de TN ven a los docentes bardeando al gobierno nacional. Así como sucede muchas veces en CABA la gente se olvida del federalismo y responsabiliza al Gobierno nacional de todos los males.
Sin embargo, 678 se tuvo que retractar ante un informe "prosciolista" realizado anteriormente a partir del affaire del ladrillo agresor. Una estrategia grotesca y barata para desviar la discusión principal, que incluso a los seguidores de House of Cards nos pareció muy burda esa imitación del programa yanqui en el cual el protagonista Underwood, promotor de una reforma educativa, es agredido en su casa luego de que un "supuesto docente" (se demuestra a posteriori que fue una opereta precisamente) le rompiera un vidrio de la ventana con un ladrillo.
Así no sólo este blog sino muchos nos quemamos las pestañas leyendo y pensando "para quién juega Baradel", un principio de razonamiento bastante equivocado y que desvía el eje de la discusión. Despues de todo somos producto de este fin de temporada del kirchnerismo, repleto de incertidumbre (por la falta de una bajada de línea clara en muchos de los aspectos sociales y económicos) donde la fuente directa de palabra pareciera que fuera el libro edulcorado de Sandra Russo y así andamos como un monton de hijos del señor topo de los simpsons, correteando y golpeándonos la cabeza entre nosotros...