Barceló. Anibal de Cartago.

Publicado el 13 agosto 2012 por Elinquilinodepapel @elinquilinodpapel

Anibal de CartagoPedro BarcelóAlianza Editorial
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Aníbal, alabado, repudiado, exiliado… Así fue tratado por su pueblo este insigne personaje histórico, a la par temido y respetado por sus enemigos, sobre todo por los romanos, con ellos tuvo un encarnizado enfrentamiento a lo largo de muchos años. Este enfrentamiento fue un pulso por la hegemonía en el Mediterráneo. Aníbal llevó el teatro de operaciones a la mismísima península itálica, y si no logró conquistar Roma fue por un cúmulo de circunstancias y puede que por alguna mala decisión.
Pero, ¿quién fue realmente Aníbal?, obviamente un gran general, pero ¿cómo pensaba?, ¿cuáles eran sus motivaciones?, ¿qué le llevó a embarcarse en una empresa tan arriesgada?... Interesantes preguntas que el autor intenta desvelarnos en este libro. 
Es esta una tarea realmente complicada, casi todos los escritos que han llegado hasta nosotros están escritos por historiadores filo romanos (Guerras de Aníbal,Polibio). Por tanto se tendríamos que poner en cuarentena algunos de los pasajes escritos por estos, sobre todo los referentes al ensalzamiento del pueblo romano ante la amenaza cartaginesa, esos que presenta la historia como la de un pueblo, el romano, que lo único que hace es defenderse de otro pueblo agresor, el cartaginés. 
Estos autores nos describen al gran Aníbal como una persona cegada por el odio hacia Roma, prácticamente con el único afán de destruir su civilización, pero la realidad no fue exactamente así, Pedro Barceló describe en su libro como cambian las tornas de la historia cuando se indaga un poco más, cuando uno no se queda en la superficie de la información. También nos ofrece algo más de luz sobre una de las mayores proezas llevadas a cabo por un ejercito en la antigüedad, el paso de la cordillera de los Pirineos y de los Alpes por una fuerza compuesta casi en su totalidad por mercenarios, acompañados por una gran caballería y por algo realmente sorprendente, elefantes. Barceló intenta dar una explicación a esta increíble maniobra militar, nos informa de como pudo realizarla y sobre todo de como Aníbal no pudo realizar muchas de las leyendas que sobre él nos han llegado.
Otro de los grandes personajes históricos que aparece en este ensayo, como no podía ser de otra forma, es el formidable general romano Escipión, una figura que quizás no se entienda sin su antagonista Aníbal. Escipión tuvo un gran respeto por su adversario, no lo menosprecio en ningún momento y puede que le tuviese incluso admiración ya que lo conseguido por Aníbal le ha permitido pasar a la historia de la humanidad y ahí se mantendrá para siempre.
Pedro Barceló se interna en una complicada búsqueda y explicación de como eran las relaciones familiares de Aníbal, y como influyó su estancia en la península Ibérica, sus alianzas con los pueblos moradores de esas tierras, el reclutamiento de mercenarios para su ejercito, la organización política y económica, el descubrimiento de los metales y la construcción de verdaderos entramados mineros que posteriormente fueron utilizados por los romanos sin olvidar, como no, las ciudades fundadas por los cartagineses en tierras ibéricas que Barceló también repasa en su obra.
¿Cómo finalizó su existencia Aníbal?, Pedro Barceló también nos relata los acontecimientos posteriores a la derrota cartaginesa en la segunda guerra púnica, como Aníbal derrotado se reinventa así mismo y pasa a ostentar cargos políticos hasta que las intrigas y traiciones en el seno del poder cartaginés le fuerzan a huir y refugiarse en países amigos, desde donde intenta volver a combatir a Roma, volver a reverdecer antiguos y perdidos laureles.
Aníbal Barca se sumerge en la historia para permanecer en ella, con su pulso a Roma logró ser uno de los artífices del auge de esta ciudad. Aníbal finalmente fue derrotado, y posteriormente, su pueblo destruido, pero lo que el desconocía es que sin lugar a dudas fue una pieza clave para la expansión romana. Una vez destruido su gran enemigo, nada se interponía entre Roma y la gloria de un imperio.
Escrito por V.M.T