Para empezar, menciona al autor H.P. Lovecraft, maestro del cuento de terror nacido en Nueva Inglaterra (por cierto, bastante racista y misógino, pero en fin), quien, respecto a las obras de terror, dice algo obvio pero que muchas veces se nos olvida: Si da miedo, es bueno.
Otros consejos de la revista son los siguientes:
-Para ser un buen escritor de terror, primero hay que ser un buen escritor. Por muchas ideas brillantes que tengas, está claro que escribir requiere leer mucho y practicar mucho.-Crea un mundo normal con gente normal que vive vidas normales y después destruye esa seguridad introduciendo en la trama algo diabólico. Cuanto mejor hayas transmitido esa credibilidad y ese realismo, más miedo dará aquello irreal que introduzcas en tu historia.
-Cuida de que tus personajes sean elaborados y no planos, como los de Lovecraft, bastante pésimo a la hora de la caracterización. Como dijo Stephen King –que a mí personalmente me gusta mucho más que Lovecraft-, lo ideal es crear personajes hacia quienes los lectores sientan empatía e interés con el fin de que, a la hora de “soltar el monstruo”, les importe lo que les suceda a estos.-Haz uso de los miedos universales, aquellos que en algún momento han causado terror a cualquiera de nosotros: los extraños, los monstruos, separarse de los seres queridos, la oscuridad, las tormentas, los objetos afilados… Debes saber emplear estas herramientas sin caer en lugares comunes sino haciendo algo original con ellas.
¿A qué estás esperando? Ponte delante de la hoja en blanco y… cuidado con las sombras alargadas y las puertas crujientes, no digo más.