IGN TV: Todo lo que tiene que ver con Batman a estas alturas es muy icónico, y todo el mundo conoce estos personajes muy bien. ¿Fue emocionante para ti saltar a este mundo con el que todos estamos familiarizados e interpretar un papel tan crucial como Jim Gordon?
Bryan Cranston: ¡No! Lo digo en serio. No lo fue. Desde el punto de vista de un actor, era casi como si alguien me preguntase: "Oye, ¿quieres hacer un papel en El Mago de Oz?" Pienso que es una proposición de perder-perder. No hay nada que puedas hacer. Puedes ir y hacerlo completamente tuyo y reinventar los personajes, y todo el mundo lo mira y dice: "¿Qué demonios estás haciendo? ¡Ese no es el León Cobarde! ¡No lo quiero!” Te rechazan. O bien, entrar e interpretarlo exactamente como lo memorizaste a lo largo de los años, y ¿dónde está la diversión en imitar al León Cobarde o al personaje que sea? Y en cierto modo tuve la misma sensación sobre Batman. Es tan icónico, tan específico, que lo miré y dije, "No lo sé", y lo rechacé en un primer momento. Rechacé la oferta y dije: "Bueno, no creo que esto sea algo que quiero hacer." Luego me pidieron que lo leyera porque me sorprendería o podría cambiar de opinión, y yo estaba intrigado por ese comentario de mi agencia. Y dije: "Está bien, lo voy a leer." Y me hizo cambiar de opinión. Me di cuenta de que tenía prejuicios al respecto. Pensé que tal vez no había ningún espacio para hacer algo interesante o diferente. Y francamente, pensaba en los papeles de la película y de la vieja serie de televisión y decía: "No creo que esto sea algo que quiera o deba hacer." Luego, cuando lo leí, dije, "Espera un segundo. Esto es interesante." Y yo no sabía que se haría desde la perspectiva de Jim, que me pareció que era una manera más creativa para entrar en ello. Debido a que Jim parece ser el que tiene la sensibilidad, y sin embargo, todavía está luchando con sus propios demonios. Era rico. Tenía varias capas, y pensé: "He cambiado de idea. Vamos a darle una oportunidad."
IGN: Has mencionado que es desde la perspectiva de Jim, y lo es en una medida enorme. En cierto modo, casi te hacen sentir como que debería llamarse Jim Gordon: Year One.
Cranston: ¡Eso no es una mala idea, Eric! ¡Vamos a empezar una campaña!
IGN: [Risas] Me gusta esa idea! Estamos acostumbrados a que se presente a Gordon en una historia de Batman y - sea Comisario ya o no - que esté en su lugar en Gotham. ¿Fue interesante para ti interpretar a un tipo que era tan nuevo en este mundo como alguien que podría estar viendo una historia de Batman por primera vez?
Cranston: Sí, lo fue. Yo había hecho una cantidad considerable de animación antes, pero francamente, con la mayor parte no estaba muy emocionado. Era más un trabajo. Un poco tonto. Pero creo que el público en general se ha vuelto más sofisticado, y lo mismo ocurre con la animación. La animación ha crecido, e hice una distinción cuando estaba en la Comic-Con de este año. Alguien dijo: "¿Te gusta hacer animación?" Y yo dije: "Esto para mí no es un dibujo animado. Animación connota niños, historias para niños, y eso es fantástico. Pero esto es más profundo, una narración más rica en forma animada, y eso es todo lo que es." Yo no lo veo de forma diferente. Si la calidad del guión no hubiera sido suficiente, yo no estaría haciéndolo. Por lo tanto, esa es la razón por la que estoy aquí, porque era una narración convincente y me atrajo eso.
IGN: Este es un Jim Gordon que es muy abiertamente heróico y físico. Realmente sabe manejarse en una pelea, más de lo que nunca habíamos visto. Pero ciertamente no es el infalible, perfecto héroe que no puede equivocarse. ¿Cuál dirías que es su talón de Aquiles, por así decirlo?
Cranston: Bueno, creo que el talón de Aquiles de Jim Gordon es que es en última instancia un ser humano. [Risas] Que es susceptible a los vicios y tentaciones, como podemos ver en esta historia, de la peor manera. Me sorprendió, porque aquí tenemos a un hombre cuya esposa está embarazada y, sin embargo, lo escribieron teniendo una aventura, que es, "¡Whoa!" Corres el gran riesgo de alienar al público completamente hacia este hombre. Pero al mismo tiempo, se crea un escenario muy real, donde este hombre está en conflicto y profundamente atormentado. Está tratando de encontrarse a sí mismo, tratando de averiguar quién es él como persona. ¿Es un héroe? ¿Es sólo un hombre tratando de arreglárselas? Parece que está luchando por encontrarse a sí mismo al mismo tiempo que está luchando para corregir lo que marcha mal en Gotham. Parece empujado hacia el centro moral de la historia, alejado de los dos extremos como Batman o los policías corruptos, los chicos malos. Él está tratando de averiguarlo, y eso me gusta. Es algo muy atractivo de interpretar. No es el hombre con todas las respuestas, sino el hombre que está luchando para obtener las respuestas.
IGN: ¿Y qué piensa de Batman ya que está en Gotham, y hay todo este crimen, toda esta corrupción en la fuerza policial? ¿Qué opina de esta especie de tercera variable extraña?
Cranston: Bueno, tiene dudas al respecto. Batman es un vigilante. Eso no está bien tampoco. Así que tiene que ser controlado. No es hasta su propio dilema personal que se da cuenta, "Tal vez he juzgado mal a esta persona, este Batman." Y él toma esa decisión en ese momento no como un agente de policía sino como un ser humano y es capaz de tomar una decisión basada en lo que él siente que es correcto, no necesariamente lo que es legalmente correcto. Y parece estar desarrollando una nueva relación aquí.
IGN: Habiendo tenido ese miedo inicial, para luego cambiar una vez que viste el guión, ¿se trata de un papel que puedes estar interesado en retomar si la oportunidad se presenta
Cranston: Sí. Quiero decir, tendría que hablar con ellos y ver lo que querían hacer y dónde querían ir, pero si la calidad de la narración está al mismo nivel, entonces estaría interesado al máximo en hacerlo . Yo no tengo un hobby, así que esto es lo que me gusta hacer. Me encanta contar historias y ésta lo era. Estoy feliz y me siento orgulloso de haber participado en ella. Lo que no quiero hacer en mi carrera, ni debo, es avergonzarme de proyectos que estoy haciendo. A mí, como he dicho siempre, no me importa si se trata de una obra infantil o una película importante. Si la historia es buena, estoy interesado. Y por eso si alguien me dijera: "¿Por qué hiciste un Batman?", Le diría: "¿Lo has visto?" "No." "Bueno, ve a verlo y luego hablaremos." Y yo quiero eso. Quiero ser capaz de dejar que mis proyectos hablen por sí mismos.
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