BBF#109
No puedo decir nada porque todavía no he empezado a leerlo, pero las perspectivas, de momento, son buenísimas. Ya te contaré. Nos seguimos leyendo.
Walter Henriksen estaba sentado en la mesa de la cocina tratando desesperadamente de desayunar parte de lo que su mujer había puesto en la mesa.Huevos con beicon. Arenque, salami y pan recién horneado. Una infusión hecha con hierbas de su huerta, la huerta que ella había deseado tener desde que habían comprado esta casa, lejos del centro de Oslo, próxima a la provincia de Østmarka. Precisamente para poder dedicarse a actividades tan sanas. Pasear por el bosque. Tener una pequeña huerta. Recoger bayas y setas, y sobre todo conseguir que la perra pudiera tener más libertad. Era una cocker spaniel y Walter Henriksen no la soportaba, pero amaba a su mujer y por esta razón había accedido a todo eso. (“Viajo sola”, Samuel Bjork)