BBF#65
Dos hombres se batían a la luz indecisa del amanecer, silueteados en la claridad gris que llegaba despacio por levante. La isla —poco más que un islote, en realidad— era pequeña y chata. Sus orillas, desnudas por la marea baja, se deshilaban en la bruma que la noche había dejado atrás. Eso daba una impresión de paisaje irreal, como si aquella porción de tierra neblinosa fuese parte misma del cielo y del agua. Las nubes eran pesadas y oscuras, y lloviznaban nieve casi líquida sobre la laguna veneciana. Hacía mucho frío aquel veinticinco de diciembre de mil seiscientos veintisiete (“El puente de los asesinos”, Arturo Pérez-Reverte)Me está gustando esta séptima y, hasta el momento, última entrega de Las Aventuras del Capitán Alatriste que, además, me sirve para dar por concluido el reto que nos propuso Carmen y amig@s. En breve, reseña. Nos seguimos leyendo.