Gracias a la técnica de fertilización denominada gametogénesis o formación de gametos por meiosis a partir de células germinales, las parejas del mismo sexo podrían ser padres biológicos de un bebé. Básicamente se trataría de utilizar el material genético, sean dos óvulos o dos espermatozoides, para poder producir un embrión, lo que supondría un gran avance en la reproducción asistida, el bebé se desarrollaría como lo haría cualquier otro bebé pero a partir del material genético de ambos progenitores del mismo sexo.
La técnica se denomina gametogénesis in vitro (IVG) y está siendo estudiada por expertos de la Universidad George Washington (Estados Unidos) en un marco de implicación práctica y ética. Con ella se hace uso de los gametos derivados de las células madre embrionarias o pluripotentes, un tipo de células con características pluripotenciales, es decir, son capaces de generar la mayoría de los tejidos convirtiéndose en varios tipos de células.
La experta que dirige este estudio explica que hasta la fecha, las parejas del mismo sexo que desean tener un bebé tienen que recurrir a un óvulo fertilizado que se implanta en una madre sustituta o de alquiler, pero no pasará mucho tiempo hasta que se pueda aplicar la nueva técnica en seres humanos, de momento se ha logrado llevarla a cabo en experimentos con roedores de laboratorio con total éxito. La experta tiene la esperanza de que en un día no muy lejano la gametogénesis in vitro sea posible en seres humanos, dando paso a una técnica nunca antes usada en la reproducción asistida humana.
Además, con esta técnica los investigadores han descubierto una forma de eliminar las transferencias de genes no deseados procedentes de los padres, lo que podría ayudar a evitar diferentes enfermedades genéticas en los futuros bebés, pero lo cierto es que actualmente ya se emplean técnicas que evitan la transferencia de embriones que integren material genético no deseado.
Ahora bien, quizá sea posible llevar a cabo esta técnica en seres humanos, pero ¿qué implicaciones éticas conlleva? ¿aceptará la sociedad este nuevo método de procreación a partir del material genético de dos individuos del mismo sexo? Los expertos manifiestan su preocupación por los dilemas éticos asociados a la nueva técnica, por otro lado temen que si esta técnica pasa a manos equivocadas se podría dar lugar a la eugenesia, es decir, la mejora de rasgos hereditarios humanos, lo que hemos conocido como bebés a la carta.
De momento los expertos explican que poseen un mínimo conocimiento sobre la implicación de cambiar los tipos de células diferenciadas a partir de células con estados no diferenciados, así como las implicaciones de borrar y restablecer patrones de impronta que puedan facilitar la reproducción, lo que indica que aún queda bastante por investigar y que pasarán aún unos cuantos años antes de que se pueda presentar la técnica para realizar con seres humanos.
Podéis conocer más detalles sobre esta investigación a través de este artículo publicado en la revista científica Journal of Law and The Biosciences.
Foto | Sprungli
Enlace permanente:
Bebés con padres biológicos del mismo sexo