Belle epoque (Fernando Trueba, 1992. España y Francia): uno de los films más respetados del cine español de la democracia, una distendida y depurada comedia- género este del cual su autor es declarado admirador- donde resaltan, con especial brillo, su excepcional reparto y su cinematografía. La acción se sitúa en los años entre la caída de la monarquía y el estallido de la Guerra Civil, con un joven, desertor del ejército para más señas, que llegará a casa de un anciano republicano donde quedará prendado de las cuatro hijas del hombre y, a su vez, él mismo será el capricho de las cuatro pájaras de cuidado. Supuso el último Oscar del cine español antes del reconocimiento internacional de Pedro Almodóvar con su Todo sobre mi madre. Su sensación de libertad (y libertinaje) fue otra de las razones que cautivaron al público.
Belle epoque (Fernando Trueba, 1992. España y Francia): uno de los films más respetados del cine español de la democracia, una distendida y depurada comedia- género este del cual su autor es declarado admirador- donde resaltan, con especial brillo, su excepcional reparto y su cinematografía. La acción se sitúa en los años entre la caída de la monarquía y el estallido de la Guerra Civil, con un joven, desertor del ejército para más señas, que llegará a casa de un anciano republicano donde quedará prendado de las cuatro hijas del hombre y, a su vez, él mismo será el capricho de las cuatro pájaras de cuidado. Supuso el último Oscar del cine español antes del reconocimiento internacional de Pedro Almodóvar con su Todo sobre mi madre. Su sensación de libertad (y libertinaje) fue otra de las razones que cautivaron al público.