Ben Harper editó en 2011 su disco Give till it's gone, un álbum conmovedor y muy personal, marcado por su divorcio de la actriz Laura Dern en 2010. Hay temas enérgicos y otros más pausados, pero ambos mezclan su momento con fuerza desafiante.
Hay colaboraciones estelares en el trabajo, Ringo Starr toca la batería en dos temas en onda liberadora psicodélica, e incluso Jackson Browne hace armonías en otro. Pero aquí Harper suda sangre y su dolor es fuente de inspiración brutal que nosotros disfrutamos. Aquí seguía con Relentless7, aunque no aparezca en los títulos junto al genio.Yo me quedo hoy con un temazo que empezaba el disco, un medio tiempo desgarrador y maravilloso llamado Don't give up on me now.