Benaglio Condena Al Mónaco En El 91′

Publicado el 02 septiembre 2018 por Carlosgu82

El Olympique de Marsella se ha impuesto 2-3 frente al Mónaco como visitante, en un encuentro plagado de alternativas, con un final sorprendente.

El encuentro comenzó con un claro dominio por parte del conjunto monegasco, que fue el dueño de la posesión durante los primeros 25 minutos. Aunque no fue capaz de aprovecharlo para generar peligro, circulando el esférico con mucha lentitud y con muchos pases en horizontal, instalándose en campo de un rival, que había salido con mucha timidez a uno de los escenarios más imponentes y complicados del fútbol francés, y del que solamente se podía reseñar su gran orden a nivel defensivo, que estaba contribuyendo junto a sus defectos personales, a que los de Leonardo Jardim apenas estuviesen creando peligro, estando posicionados además con un perjudicial 4-3-3, que le estaba restando protagonismo a la hora de jugar por dentro.

Superado el ecuador del primer tiempo, el control del juego se equilibró mucho más, al hacer acto de presencia, el debutante Strootman, y Sanson, en el centro del campo visitante, dándole mucho más criterio a la elaboración del conjunto marsellés, que únicamente había llegado al área rival a la contra, y mucho más control en el juego. Con todo ello, la dinámica de juego en el encuentro cambió de rumbo, hacia un mayor manejo del partido por parte de los visitantes. Aunque esa circunstancia, también le permitió encontrar más espacios al cuadro monegasco, que atacando por bandas logró generar mucho más peligro. Sin embargo, el Estadio Louis II, se iba a llevar su primer mazazo, cuando Mitroglou envió al fondo de la red con un testarazo soberbio, en el enésimo aviso con peligro del equipo de Rudi Garcia en los últimos minutos, un centro medido de Payet desde la derecha.

El segundo tiempo comenzó con un Mónaco mucho más intenso y despierto, que logró igualar la contienda de inmediato, después de un error de Rami, que le quiso devolver un balón al portero Pelé en corto defectuosamente. Lo cual aprovechó Falcao a medias, pues regateó el portero, pero se topó con el central francés, que con su despeje le dejó el balón en bandeja a Tielemans que marcó a placer. Pocos minutos después, el delantero cafetero puso en ventaja al equipo local, tras rematar un centro desde la derecha, rechazado por Rami, que acabó en el fondo de la red. Tras el gol, el Olympique de Marsella se convirtió en el dueño absoluto del partido, monopolizando el cuero, ante un cuadro rojiblanco que había retrasado notablemente sus líneas de presión, renunciando al ataque, y buscando únicamente el contraataque, y en contadas ocasiones.

Pasado el ecuador del segundo tiempo, y la hora de juego en el partido, consiguió coger aire, gracias a que empezó a tener más balón, y ganó presencia en el costado derecho con la entrada de Sidibé que jugó por delante del lateral derecho, en un momento de dudas para el conjunto marsellés, que iba perdiendo continuidad en ataque, a la hora de crear peligro. Cuando la contienda estaba en tierra de nadie, y más centrada que nunca en el centro del campo, Thauvin, que había entrado por Sarr a la hora de juego, igualó el marcador con un certero disparo de pierna izquierda, en el que Benaglio pudo hacer algo más.

Sin embargo, este gol no envalentonó al cuadro de Rudi Garcia, que mostró muy poca ambición por llevarse el partido, y que en algunos momentos contribuía al bajo ritmo de intensidad que prevalecía en el partido. De este modo parecía terminar el partido, con un pacto de no-agresión entre dos equipos, plenamente conscientes de que lo máximo a lo que aspiran es al segundo puesto en la clasificación. Aunque en el momento más inesperado, y por medio de un ex del Mónaco como Germain, que acababa de entrar, los visitantes se pusieron por delante en el marcador, tras el remate de cabeza del ariete en el primer palo a la salida de un córner, con la colaboración involuntaria de Benaglio en el minuto 91.