Benahavís, a la que podíamos denominar “el comedor de la Costa del Sol” es una pequeña localidad adentrada en la zona montañosa de la Costa del Sol occidental y, curiosamente, a tan sólo 7 km. de la playa. Es obvio, nos encontramos en la provincia de Málaga. Si cabe ahora es más conocida internacionalmente, pues es aquí, en un hotel de lujo por supuesto, dónde se hospedó Michelle Obama en su reciente visita a España. Llegar desde Marbella es muy fácil: dirección Estepona, por la N-340, pasado San Pedro Alcántara (total 16 km), existe un desvío a la derecha que nos marca la dirección. Siete kilómetros más de una bonita carretera, bien asfaltada, por el curso del río Guadalmina.
Castillo Montemayor
En plena naturaleza.
Nos encontramos en la falda sur de la Sierra de las Nieves, en las estribaciones de la Serranía de Ronda. Su término municipal es atravesado por tres ríos: el Guadalmina, o río de las minas, rodea la parte este y cuyas aguas movían los molinos harineros; el Guadalmansa, por su parte oeste lo atraviesa de norte a sur y el Guadaiza, que pasa por delante de las ruinas de Daidín.
Las Angosturas
Subiendo por la carretera podréis ver como el Guadalmedina se encaja formando un cañón. Solo queda alzar la vista para descubrir las cumbres de “Las Angosturas”. Antes de la entrada al pueblo debemos detenernos en la Charca de las Mozas. Declarado por la Junta de Andalucía como “Monumento Natural”, es una hoya sobre el propio lecho del Guadalmedina formándose remolinos, en ocasiones hasta peligrosos.En días claros desde sus montes, como por ejemplo el del Pico de Monte Mayor, tendréis una vista maravillosa que abarca más de 100 km. de la Costa del Sol e incluso África. Otros lugares a visitar serían el Coto de la Zagaleta, la cueva del Puerto Capuchino y el valle del Guadalmansa.
La localidad
¡A comer!.
En restaurantes os recomiendo: Lindaraja, con un patio andaluz precioso; Los Abanicos (éste lo recomienda también la guía Michelín); Rufino, Los Faroles y Eugenio Las Cañas. En todos ellos, os encontraréis con una atención personalizada. Tener en cuenta que la mayoría de los establecimientos son familiares, es decir, con casi total seguridad os atenderá el dueño o alguien de la familia. ¿Los precios? Comprobaréis que no es caro comer en Benahavís. A disfrutar, ciudadanos viajeros.