Bendecida por la sombra, Richelle Mead

-Vamos a dar un paseo.
-¿A dónde?
-Da lo mismo. Tenemos que lograr que te calmes.
-¿Ah, si? ¿Te da miedo que salgan a la luz mi lado oscuro y mi probable demencia?
-No, me da miedo que salga a la luz el lado normal de Rose Hathaway.
-¿Es que hay alguna diferencia?
-Sí. El segundo me da pavor.
Rose sabe que está prohibido enamorarse de otro guardián. Su mejor amiga – la última princesa Dragomir – siempre debe ser su prioridad. Por desgracia, en lo que respecta al impresionante Dimitri Belikov, algunas reglas se dictan para ser quebrantadas…
Sin embargo, una extraña oscuridad comienza a crecer en la mente de Rose, y unas siluetas fantasmales advierten de la proximidad de un terrible mal a las puertas de la academia St. Vladimir. Los no-muertos acechan y desean vengar las vidas que ella se ha llevado consigo. En una trepidante batalla que rivalizará con sus peores pesadillas, Rose se verá obligada a escoger entre la vida, el amor y las dos personas que más le importan… ¿Pero significará su elección que solo una de ellas podrá sobrevivir?

Título original: Shadow Kiss
Autora: Richelle Mead
Saga: Vampire Academy #3
Género: Comedia romántica
Editorial: Alfaguara
ISBN: 978-84-2040-729-6
Año de publicación: 13/11/2008 En esta edición: 02/02/2011
Nº de páginas: 480
Goodreads: Bendecida por la sombra, Richelle Mead
Librote: Bendecida por la sombra, Richelle Mead
Precio: 14,95€

Wow, señores, qué libro. Si en las reseñas anteriores no recomendaba la saga a los no-fans del género, ahora lo hago simplemente por este libro. Aún sigo en shock. Son momentos como este en los que me apetecería hacer una reseña llena de spoilers para comentar todos los detalles, pero no, me mantengo fiel xD
Rose acaba de recibir sus dos primeros tatuajes por haber matado stigoi, los mismos que le

partieron el cuello a Mason. Aún no le ha dado tiempo a asimilar su muerte cuando empieza a ver su fantasma deambulando por ahí. Siempre es igual: aparece cuando ella está sola, con mirada triste y unos ojos que parece que le quieran decir algo, pero sin mediar palabra. ¿Serán imaginaciones suyas? ¿Se estará volviendo loca?
En este libro vemos, de nuevo, que la madurez de Rose va aumentando a marchas forzadas. Antes, su meta en la vida era cuidar de Lissa y matar strigoi a toda costa. Pero ahora que ha visto la muerte con sus propios ojos y de sus manos, entiende por qué otros dhampir como su madre no alardean de sus victorias, ya que la muerte no es algo de lo que alegrarse.
Esta madurez, a mi parecer, es la que hace que avance en las relaciones con las personas cercanas a ella. La madre de Rose siempre ha sido una persona por la que ella nunca ha sentido mucho afecto, llegándole a molestar el alarde con el que ve que Janine cuenta sus batallas (motivo por el cual nunca está con su hija) pero, sin embargo, después de todo lo que le ha ocurrido siente más respeto hacia ella y entiende mejor por qué es tan fiel a su trabajo como guardiana.

Tanto ella como Dimitri saben que no pueden estar juntos por la seguridad de Lissa y, aún así, cada vez les cuesta más mantenerse alejados el uno del otro. Y después está Adrián... Le estoy empezando a coger cariño a este personaje; empieza a demostrar que lo que siente por Rose va más allá de sus caprichos mujeriegos, negándose a dejarla ir sin tener primero una oportunidad. También va cogiendo mucha importancia en la historia ya que, al poder utilizar el espíritu, es un compañero de magia para Lissa: se ha mudado provisionalmente a la academia con el objetivo de aprender más sobre los dones de ambos.
Es él precisamente quien empieza a pensar que los ataques de ira y de oscuridad que dominan a Rose últimamente pueden provenir de Lissa, ya que sigue utilizando el espíritu. Esto explicaría también las apariciones recientes del fantasma de Mason.
Además, desde la propuesta de Tasha en Sangre Azul de que los moroi pasasen a la ofensiva, la idea de enseñar a luchar con la magia ha arraigado en las mentes de los moroi y cada vez son más los que quieren hacerlo.
En definitiva, es el libro de la saga que por el momento más me ha gustado. De nuevo, Richelle Mead hace que con cada capítulo quieras más. Escenas románticas, escenas de lucha y escenas de reflexión que mantienen con el corazón en vilo. Pero, sobretodo, el final: un giro argumental de 180º grados del tipo que te ves venir pero que rezas para que no ocurra. Sin duda, una novela que se merece una de las notas más altas por mi parte.

Richelle Mead (1976) es una autora estadounidense de novelas fantásticas. Se graduó en la Universidad de Michigan y obtuvo una Maestría en Artes sobre Religión Comparativa por la Universidad del Oeste de Michigan. Actualmente reside en Seattle con su marido mientras trabaja en las próximas entregas de Vampire Academy.

Iban a ser unas seis semanas muy largas.

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kyanea.rb@gmail.com

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