Beneficios del Social Media Para Tu Negocio

Publicado el 22 octubre 2013 por Iplanet @xwin
   Desde que estamos en Viena, prácticamente el único pescado que comemos es bacalao. Aprovechamos los viajes a casa para traer unas cuantas bandejas de bacalao salado y lo vamos comiendo poco a poco. A veces encontramos algunos buenos lomos de salmón o bonito congelado, o unas truchas, pero normalmente no es así.    Antes no lo preparaba nunca, pero ahora me ha enganchado y siempre estoy buscando nuevas formas de cocinarlo: bacalao dourado, club ranero, al ajoarriero, en saquitos con pasas, o simplemente con tomate y pimiento, en ensalada de bacalao con naranja....    Por eso en cuanto vi esta receta de Lolah, sabía que no tardaría en hacerlo. Está buenísimo. El toque de limón le va estupendamente a la salsa cremosita (que a mi me quedó mucho más gorda que a Lola, pero estaba tremendamente buena...), y a las patatas, y al bacalao... ¡un vicio!    El la original se llama fricasé de bacalao.  Un fricasé es tradicionalmente un guiso de algunas regiones de francia, normalmente de carne de ave de corral, pero también de otras carnes o pescados. A mi me suena demasiado fino para un plato de un día normal, por lo que prefiero llamarlo bacalao en salsa de limón. Pero no dudéis que cuando lo prepare para amigos, diré fricasé, que queda tan finolis... es como el solomillo Wellington, que me da hasta risa.    Y si Lola se quejaba de sus preciosas fotos, no os digo nada yo de lo mal que se ven las mías. Pero es que la receta sale tan rica que no podía dejar de contárosla... Saladita, ácida por el limón, cremosa... Ingredientes:    - 400g de bacalao desalado    - 400g de patatas    - 1 cebolla    - 2 yemas de huevo    - 1 limón    - 1 diente de ajo    - Harina    - Aceite de oliva virgen extra    - Sal, pimienta Preparación:    Una vez que tengamos el bacalao desalado (ver aquí), lo cortamos en trozos no muy grandes, y lo escaldamos tres minutos en agua hirviendo. A continuación, lo escurrimos, reservando el agua, lo enharinamos, y lo freímos en aceite bien caliente, hasta que se dore ligeramente. Lo ponemos sobre un papel de cocina y reservamos.      Así pues, te invito a que comiences a leer más sobre el tema y a documentarte sobre todo lo que necesitas saber para sumergir a tu negocio en el fascinante mundo de las redes sociales y disfrutar de sus beneficios.

Más ideas para negocios:

  Lavamos y pelamos las patatas y las cortamos en rodajas finas como de medio centímetro. Las freímos en el mismo aceite del bacalao y las reservamos.    De mientras, ponemos a pochar la cebolla con el ajo, a fuego suave, hasta que comience a dorarse.    Cuando tengamos todo listo, ponemos en una sartén ancha o una cazuela baja dos vasos del agua de cocer el bacalao, y disolvemos en ella media cucharada de harina. Colocamos con cuidado las patatas, sobre ellas la cebolla, y por último el bacalao, y dejamos cocer a fuego suave unos 10 minutos. Si vemos que se reduce mucho, igual que me pasó a mi, podemos añadirle un poco más de agua para tener una salsa más ligera si queremos.    Una vez pasado este tiempo, colocamos el bacalao en el plato en el que vayamos a servirlo, dejando las patatas con la salsa en la cazuela. En un vasito, mezclamos bien las yemas con el zumo del limón, y lo añadimos al resto de la salsa. A fuego muy bajo, mezclamos unos minutos hasta que se integre todo bien.    Servimos la salsa sobre el bacalao y las patatas mezcladas con la salsa a su lado. Ya veréis como no queda ni pizca en el plato.