Benito Lamas. La cara que todos los cocineros tienen grabada en sus cerebros.

Publicado el 04 marzo 2015 por Patricia Ortega

O al menos todos los cocineros de España. Benito Lamas es el único inspector del que se conoce su aspecto de la Guía Michelin, y por supuesto todos los cocineros del país tienen su foto colgada en sus cocinas.

Yo la he buscado como loca y no ha sido posible encontrarla en la Red. Esto es todo lo que he podido conseguir.

Y cómo no tenerle presente en sus cocinas. Ya sabéis que la Guía Michelin, con sede en Francia, tiene todo un ejército de críticos, de “probada reputación”, encargados de visitar los restaurantes a escondidas y de incógnito durante el año. ¿Sus funciones?: catalogar año tras año el menú del restaurante para decidir si dan estrellas, o las quitan o las aumentan a los que ya tienen.

A nivel internacional no tienen competencia porque nadie tiene tantos inspectores. 85 en todo el mundo de los cuales 12 son españoles.

¿Y qués lo que tienen qué hacer? comer y cenar siete días a la semana en restaurantes de 200 y 300 euros por cabeza, yo me lo pido pero ya.

Pero dar una estrella no es nada sencillo. Se valora la creatividad en la cocina, la selección de los productos, el dominio del punto de cocción, los sabores, la relación calidad precio y la regularidad, es decir que el nivel de la cocina se mantenga constante.

Para dar una estrella se realizan hasta 4 visitas pero eso sí, siempre son inspectores diferentes.

España tiene 8 restaurantes con 3 estrellas, 21 con 2 estrellas y 154 con 1 estrella. Y es el quinto país por detrás de Japón, Francia, Italia y Alemania.

Curioso ¿no? Porque en los últimos años nuestra cocina ha llegado a niveles magistrales de la mano de Ferran Adría y de toda su escuela de cocineros ahora desperdigados por España y por todo el mundo reinventando la cocina como hasta ahora la conociamos.

Aquí falla algo chicos ¿No crees Benito?

La opinión de Soficó. 12 años.

Yo quiero también un trabajo así. Comer y cenar a todo lujo pero luego tendrán que ir al gimnasio ¿no? Porque se van a poner como “bolas”.


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