Uno de los manjares de la gastronomía cordobesa son las berenjenas a la miel de caña, herencia de nuestra cultura gastronómica árabe por lo que es una tapa típica que siempre podrás degustar en cualquier restaurante cordobes, sobre todo en los restaurantes cercanos a la judería.
Una rica combinación dulce y salado, un contraste de sabor que las hacen deliciosas, la miel de caña ó llamada también melaza de caña, más oscura y con un sabor muy característico, nada tiene que ver con la miel de abeja, su sabor es otro muy diferente y que le aportan al plato una gran personalidad, que te dejarán gratamente sorprendido por ese contraste de sabor y por su sencillez.
Para hacerlas no encontraremos gran dificultad ya que sólo lleva ingredientes muy sencillos y que siempre suelen haber en nuestra cocina.
1-Hacemos una blanqueta para emblanquecer y quitarle el amargor a las berenjenas: agua, sal, y harina, removemos bien y sumergimos en ella las berenjenas ya cortadas en discos finos o como si fueran barritas de un centímetro de grosor dejamos sumergidas en esta blanqueta como mínimo una hora.
2-Después de que las hayamos tenido sumergidas en esta blanqueta la dejamos escurrir.
3-En una bolsa ponemos un poco de harina metemos las berenjenas para que queden bien enharinadas para ello cerramos la bolsa y sacudimos bien con ellas dentro
4-Ponemos el aceite a calentar a alta temperatura y freímos. Unos minutos hasta que veamos que están doradas por ambos lados sacamos y dejamos sobre una servilleta para que absorba toda la grasa de la fritura y ya sólo queda servir con unas hebras de miel de caña por encima.