Sin embargo, ahora , la capital germana es una ciudad que podría ser totalmente Viejenial ya que una vez pasado el furor de la reunificación la ciudad ha cogido valores globales , han subido mucho los precios del suelo y de todo, y por cierto , ya no es tan Millenial.
Pero sobre todo, yo la he encontrado un gran destino Viejenial, porque es una ciudad para pensar. Cada paso que das, cada lugar que visitas es un estímulo a la reflexión de los paradigmas que hemos vivido en el siglo XX, y nos desata un montón de recuerdos de cómo era el mundo en los 70/80s cuando sabíamos del esperpento de un país y una ciudad divididas como realidad física de los paradigmas políticos que se vivían entonces.
Puede que para los Millenials aquello aluda a un decorado, sin embargo para los Viejenials alude a realidades. Para mí que lo he vivido, ya que estuve estudiando alemán en Berlín en el 84, volver a este lugar ha sido un gusto, casi una fantasía insospechada entonces, cuando sólo podíamos entrar en el este por el día, no se permitían estancias superiores a las 24 horas. Recuerdo esas horribles escenas en la estación de tren por la que entrábamos dónde cantidad de gente esperaba a sus familiares del oeste, con víveres o "lujos" como las pantys para las mujeres, o el simple dentífrico.
Check Point Charlie, ahora, donde unos actores remedan las situaciones vividas antiguamente
Igual de esperpéntico y trágico era el cruce por Check Point Charlie en coche, donde se pasaba miedo, y hoy se ha convertido en un Monumento-Parodia de la situación aquella, y los alrededores en un Parque Temático de la dramática viscicitud de la grieta.Pero lo que no olvidaré jamás es el tránsito en metro por las estaciones del Este. Había líneas de UBahn de Berlín occidental, que inciaban y terminaban su trayecto en Berlín occidental, pero que en su camino se metían en el lado dominado por la DDR, y recuerdo esas imágenes sórdidas , con militares apuntando a golpe de metrayeta. Las luces se bajaban, la velocidad se ralentizaba, y así entrabas en ese otro mundo al que nadie quería bajarse, pero que desde el otro lado prohibían escapar.
PASEAR CON SANDEMAN
"Berlín es pasear por cicatrices" así nos inició el paseo la guía de esta curiosa empresa que ofrece circuitos gratuitos por la ciudad, que tiene el sistema de caja inversa, es decir, si te ha sido útil, pagas una propina a la guía.
Es muy recomendable este circuito para comenzar a meterte en tema en la ciudad. Si no estás muy fresco en la historia de la ciudad este tour te pondrá en tema, y te abrirá un montón de preguntas , cuestionamientos y ganas de saber más sobre esta ciudad que ha hecho tan bien la catarsis de su historia.
Los tours salen desde el starbucks de la Puerta de Brandenburgo, y te pasean a pie por la zona de la DDR, pero haciendo hincapié en los lugares e hitos del gobierno nazi, que llevaron a la guerra, al holocausto, y a la división posterior.
Luego de una introducción nos vamos a ver el controvertido Monumento a las víctimas judías en Europa, luego pisamos el que fue el Bunker de Hitler, luego reflexionamos sobre la grieta del muro, luego pasamos por los edificos que fueron ministerios del Fuhrer, pasamos por Topografie des Terrors, Chekpoint Charlie, vamos luego a la Berlín , y terminamos frente a la futura Opera y frente a la Universidad Alexander Von Humboldt.
BERLIN VIEJENIAL CIUDAD DE ARTE
Berlín tiene una prestiogiosísma isla de los Museos, que es uno de los Must de Europa de los Viejenials que amamos el arte. Encerrada entre dos aguas del río Spree, esta isla lleva en sus entrañas un valor incalculable, de obras que en su momento vivieron el devenir de haber quedado dentro de la DDR, o museos que fueron casi totalmente destruídos en los bombardeos de la segunda guerra mundial, como el Neues Museum , sede originaria de la famosa Nefertiti
By Rüdiger Stehn from Kiel, Deutschland Nofrete-Büste, Ägyptisches Museum, https://commons.wikimedia.org
Nefertiti pasó sepultada y sin sobresaltos 3.400 años en el Valle de Amarna, hasta que fue descubierta por el arqueólogo Ludwig Borchardt en 1912
Con la recuperación del Neues Museum , reinaugurado en 2009, se completa la lista de los prestigiosos Altes Museum, Pergamon, Bode, y Alte Nationalgalerie.
Si has de visitar más de dos museos, conviene sacarse la entrada global de la Isla, que es como un pase a todos los museos. También están incluídos en algunas tarjetas de bonos de transporte, pero son sólo convenientes si tu estancia supera los 7 días. Puedes consultar detalles en este enlace de la berlin-welcomecard.
BERLÍN A MODO HOP ON HOP OFF
Es como siempre el mejor modo de recorrer una ciudad cuando llegas por primera vez. Te hacen los recorridos globales de los sitios de interés, vas sentado en alto contemplandolo todo y con una alocución que te va haciendo la introducción de lo que has de ver. En Berlín hay dos empresas principales haciendo esta labor, con precios que rondan los 22/25 euros al día, y por apenas 3 o 4 euros más tienes la posibilidad de agregarle 24 horas. En Berlín debes estar atenta ya que los autobuses amarillos no incluyen el segundo circuito, el violeta, en el precio principal, y es el que te lleva a los lugares más alejados como puede ser la Karl Marx Allee o el East Side Gallery. Te lo cuento en
BERLÍN ES MUY VIEJENIAL PARA IR DE SHOPPING
Tan descomunal como en todo, las posibilidades de compra en la capital germana son inmensas en todos los sentidos, tanto en barrios como en la cantidad de Centros Comerciales como en su tamaño. Entre ellos destaca el MallBerlín, un gigantesco Shoping en Leipziger Platz que por sus dimensiones y diseño se convierte en una atracción en sí mismo, puedes pasarte el día allí comprando.
También hay que visitar las famosas KaDeWe (Kaufhaus des Westens) un edificio clásico situado en Kurfurstendamm en Wittenbergplatz. Desde allí , podemos iniciar el recorrido por esa famosa arteria, elegante en sí misma, y con un nivel de tiendas espectacular, incluyendo marcas alemanas para nosotros desconocida, pero de enorme calidad, diseño, y precios razonables.
Para ver y comprar nuevas tendencias, hay que desplazarse a Mitte, donde están las tiendas más "cool" , no por ello más económicas. No perderse la calle en donde como anécdota contarles que nos costó un montón encontrar un sitio para tomar café
Y desde allí se puede aprovechar para conocer la inefable Primark de AlexanderPlatz, donde por cierto tienen lindísimos souvenirs de Berlín, y a muy buen precio.