HISTORIAS QUE ME CONTARON EN SURBITON
I
Oía un ruido seco.La única forma de sabersi había sido una puerta o una bombaera mirar si los pájarosalzaban el vuelo.
II
Cuando la vi supe que viviría con ella.Caminaba sin hacer ruido, como los gatos.Su única manía: de pronto musitaba,a punto de quedarse dormida:"por favor, cierra el armario".Desde entonces -y ya hace tiempo que novivimos juntas-me aseguro de cerrarlotodas las nochesantes de acostarme.
III
Los bancos junto al Támesisllevan cada uno escritoel nombre de un muertoen el respaldo.Pasan los barcos con macetas de colores,florecidas.Pasan los cisnesy los niños,los perros y los viejos.Camino despacio,leyendouno a uno los nombres de todos los muertosjunto al Támesis.
Berna Wang en Pequeños accidentes caseros (amadaRamada Ediciones, 2004).