En realidad el nombre de la esposa de Alfonso II no aparece en ningún documento ni crónica contemporánea a su reinado. No olvidemos que se le llamó el rey Casto, de ahí que se píense que no tuvo mujer. Hemos de remontarnos al siglo XIII al Chronicon Mundi de Lucas, obispo de Tuy, que dice así: "(...) Y había tomado por mujer a Beta, hermana de Carlo, rey de los franceses, la cual, que por no haberla visto y por quitarse de lujuria, fue llamado rey Casto (...)" Por lo que según el autor será hermana de Carlomagno. Pocos años después Rodrigo Jiménez de Rada en su De Rebus Hispaniae dice: "(...) aunque tenía esposa, se mantuvo siempre alejado de todo contacto con ella, gobernando el timón de su reino con castidad, austeridad, pureza y cariño, querido por Dios y por los hombres (...)" Por lo dicho en ambas crónicas debemos interpretar que el matrimonio tuvo lugar por poderes y nunca se consumó.
En realidad el nombre de la esposa de Alfonso II no aparece en ningún documento ni crónica contemporánea a su reinado. No olvidemos que se le llamó el rey Casto, de ahí que se píense que no tuvo mujer. Hemos de remontarnos al siglo XIII al Chronicon Mundi de Lucas, obispo de Tuy, que dice así: "(...) Y había tomado por mujer a Beta, hermana de Carlo, rey de los franceses, la cual, que por no haberla visto y por quitarse de lujuria, fue llamado rey Casto (...)" Por lo que según el autor será hermana de Carlomagno. Pocos años después Rodrigo Jiménez de Rada en su De Rebus Hispaniae dice: "(...) aunque tenía esposa, se mantuvo siempre alejado de todo contacto con ella, gobernando el timón de su reino con castidad, austeridad, pureza y cariño, querido por Dios y por los hombres (...)" Por lo dicho en ambas crónicas debemos interpretar que el matrimonio tuvo lugar por poderes y nunca se consumó.