Bettye LaVette, en la sala Take Five de Alicante - 20 de marzo de 2011-

Publicado el 22 marzo 2011 por Susanabb
Bettye Lavette. Photo by Carol Friedman___    Bettye LaVette, en la sala Take Five de Alicante. 20 de marzo de 2011
   Creo haber comentado en alguna ocasión anterior, acerca de lo que yo llamaría “un auditorio muerto”.
   Hoy tiene sentido esa apreciación mía, porque así es como el domingo estaba, - como el domingo estuvo, - el auditorio del salón de actos del palacio de Congresos de Alicante, hasta que una esplendida y eléctrica Bettye LaVette, lanzó al aire sus primeras notas desde el backstage, para tomar las riendas de la noche, poniéndose en marcha, movilizando hasta el último de los músculos de su cuerpo, para que el personal despertase de una insulsa morbidez inicial, que me permito atribuir a un absoluto desconocimiento previo de la personalidad de quien, con tan exquisita brillantez, ocupaba las tablas del escenario… y el auditorio revivió; y no fuera precisamente porque, - afortunada coincidencia o no, - el Palacio de Congresos y su sala Take Five, estén ubicados en el edificio del Colegio de Médicos de la ciudad, sino por el arte y los sobrados meritos de una artista soberana en lo suyo y en permanente estado de gracia; una mujer con una agilidad prodigiosa, una voz formidable, potente y desgarradora, y una versatilidad en sus capacidades interpretativas, acerca de las que no encuentro referentes comparables, a pesar de que muy a menudo se la haya comparado con la popular Tina Turner.
   En ese mismo orden de cosas, es notable reseñar el hecho de que la artista supiera abstraerse y sobreponerse desde el primer instante, al desangelado aspecto que presentaba la sala, por una lamentable escasez de público, que desconozco si es achacable a la falta de promoción del acto, - era el primer concierto de la dama en su gira por España, - o al limitado conocimiento que el público en general pudiera tener de la larga trayectoria y el trabajo de la artista, o de la celebración del propio evento; en todo caso, esta no es ocasión para establecer comparaciones odiosas, pero sí para lamentar que mis paisanos, buenos aficionados a la Música, - así, con mayúscula, - no pudiesen disfrutar de un concierto de muy superior categoría a la que se nos tiene acostumbrados por estos pagos; esperemos que no ocurra lo mismo, con los otros espectáculos que la señora LaVette tiene programados para su gira española, en Madrid y Barcelona, de manera que al menos los buenos musiqueros de esas ciudades, puedan disfrutarlos.
   Esta veterana cantante, - recordemos que sus primeras grabaciones datan de la década de los 60, - es el funk,  es el blues, es lo jazzie, y en definitiva, es la música viva, puesto que cualquier palo que toca, simplemente lo hace suyo, enriqueciéndolo, personalizándolo, atrayéndolo a su ámbito personal, el ámbito de un extraordinario animal de escenario, un ser cautivador y nacido para vivir sobre las tablas, alguien con un privilegiado espíritu musical en su interior y con la firme voluntad de dejarlo salir para ser compartido con nosotros, los musiqueros, haciéndonos sentir ese pálpito incomparable, que algunos afortunados sentimos, cuando tenemos ante nosotros a un artista de su talla en plena ebullición; una artista brillante, motivadora, emotiva y joven, muy joven, - por encima de lo que pueda señalar su partida de nacimiento, - alguien que además, ha tenido la virtud de saber seleccionar un cuidado repertorio y un magnifico elenco de cuatro músicos, - guitarra, bajo, batería y teclados, - que la secundan y acompañan con notable solvencia, no solo con sus instrumentos, sino poniendo voces a los coros en varios temas.
   Un viejo compañero me criticaba hace unos días, el hecho (cierto) de que cuando comento en público o privado, los conciertos a los que acudo, se me va la olla exagerando, - quizás en exceso, decía él, - los adjetivos a mis comentarios laudatorios; y es que es un hecho (no menos cierto) que nunca tuve la intención ni la ocurrencia de acudir a un concierto del que sospechase que no me iba a interesar ni satisfacer, motivo por el cual, jamás osaría comentar en un sentido u otro, un acontecimiento que no hubiese vivido con todos mis sentidos; menos aún, si no me había enterado de su existencia… y eso viene a cuento, por lo ya comentado sobre la falta de información acerca de algunos eventos interesantes, de los que el personal se entera (a veces) por el simple boca a oreja. Esto sí, es censurable.
   Y, por si pudiera servir de algo, me permitiría llamar la atención de quien corresponda, acerca de la lamentable escasez de información que recibimos sobre algunos actos realmente importantes, en una época, en la que precisamente eso, - información, - parece ser lo que sobra por todos lados.
   Me abstendré de poner ejemplos; podría ser un mal chiste.
   A buen entendedor…
   Musiqueros todos, recibid un cordial saludo y quedáis emplazados para la próxima; siempre vuestro:El Musiquero ImpertinenteManuel Villacieros
Casi al final del concierto, Bettye interpretó el tema de George Harrison “Isn't It a Pity” de su último disco ‘Interpretations: The British Rock Songbook’
Bettye LaVette en MadridFecha: martes, 22 marzo de  2011
Hora: 21:00 h.
SALA CARACOL
Bettye LaVette en BarcelonaFecha: jueves, 24 marzo de 2011Hora: 21:00 h.L’AUDITORI


PÁGINA OFICIAL DE BETTYE LAVETTE
  Bettye LaVette nació en Detroit en 1946. Es, con toda seguridad, una de las grandes divas del soul americano. Con dieciséis años grabó su primer single que atrajo rápidamente la atención de los cazatalentos discográficos. Ese mismo año editaba su primer álbum, 'My man is a lovin' man' que la llevó de gira con el mismísimo James Brown. En las siguientes cuatro décadas ha lanzado singles en diferentes discográficas, entre ellas Motown o Atlantic. Comparada con Tina Turner o Aretha Franklin. Después de 'I've Got My Own Hell To Raise' con el 'Little Sparrow' de Dolly Parton, Bettye nos presenta 'Interpretations: The British Rock Songbook' con una notable versión del  'Don't let the sun go down on me' de Elton John.
Si estás en Madrid todavía puedes acercarte a la SALA CARACOL, al concierto de las 21:00 h. Merece la pena.