Garrido cuenta con un amplio reconocimiento en el ámbito de la literatura de divulgación de la criminología forense y estudios sobre violencia (El psicópata, Amores que matan, Cara cara con el psicópata, Los hijos tiranos, La mente criminal, Mientras vivas en casa, etc). También es autor de numerosos artículos en revistas de España, Reino Unido y EE.UU y periódicos de toda España, tales como Las Provincias (Valencia), El País, El Mundo, La Vanguardia y El periódico de Cataluña. Ha participado como asesor científico en telefilmes y reportajes sobre casos criminales. Del mismo modo, es colaborador habitual de programas de radio y de televisión de debate, cultura y divulgación sobre temas como la psicopatía, la investigación criminal, la violencia familiar o la delincuencia sexual. Actualmente se encarga de realizar los perfiles criminológicos en el programa Expediente abierto de Antena 3.
Nieves es una lectora incansable de todo tipo de literatura, pero sobre todo de novela negra y criminal. En la actualidad está estudiando Criminología y trabaja en el Ayuntamiento de La Coruña.
ENTREVISTA A LA AUTORA NIEVES ABARCA EN 'CRIMENYCRIMINÓLOGO'
- ¿Con qué nos vamos a encontrar en este novela?
En “Crímenes Exquisitos” nos vamos a encontrar fundamentalmente con un asesino distinto a todos. Un asesino que ha dejado el cadáver de su víctima dispuesto de una forma muy especial, recreando una obra de arte de una forma determinada y minuciosa. Nos vamos a encontrar también con una inspectora de la policía nacional, Valentina Negro. Joven, ambiciosa, pero también insegura, y lastrada además por su pasado que la atormenta. Y finalmente con Javier Sanjuán, un criminólogo famoso y algo enigmático que se involucra en el caso para enfrentar el reto de resolver una escena del crimen totalmente nueva para él.
- ¿Como surgió la idea de escribir esta novela entre usted y Vicente Garrido?
No fue un proceso demasiado consciente, a los dos nos encanta la novela negra y tenemos muchos gustos en común en lo que respecta a cine, literatura, arte…Nos dimos cuenta de que nos faltaba “algo”, y ese algo era la novela que nos gustaría leer en realidad. La solución era escribirla, por supuesto.
- ¿Se fraguo su argumento en experiencias reales?
No, aunque siempre se utiliza parte de la vida para poder generar personajes más creíbles, pequeños detalles, anécdotas de amigos…pero por mi parte no. En el caso de Vicente, él sí está más acostumbrado a lidiar con crímenes escabrosos y con criminales, es una figura reconocida en ese ámbito, y mucho de lo escrito, especialmente la exploración de la mente criminal, se basa en sus estudios e investigaciones.
- ¿ Es difícil escribir una novela entre dos personas que les separa mas de 1000 kilómetros?
En absoluto. Gracias al teléfono e internet, el contacto era continuo y fluido. Además, cada cierto tiempo hacíamos reuniones de trabajo en persona tipo “brainstorming” para clarificar ideas y concretar el argumento.
- ¿Como fue la experiencia de trabajar con Vicente Garrido?
Para mí fue una experiencia maravillosa. Solo por ver los procesos de creación de ideas de Vicente “in situ” ya valió la pena. Fue un aprendizaje continuo y muy fructífero. Y además, resultó ser un proceso muy divertido. Disfrutamos mucho escribiendo la novela y yo creo que se nota en el resultado.
- ¿Como una historiadora del arte se ve envuelta en la escritura de una novela criminológica?
(Dejemos lo de “gran” jajaja.) Mis dos grandes pasiones en la vida, además de escribir, son la criminología y el arte, así que unirlas para mí fue un gran placer. No podría elegir entre ambas disciplinas, las dos me apasionan, si bien la criminología fue una vocación tardía que desarrollé poco a poco, y al principio de forma muy intuitiva. Leía todo lo que caía en mis manos, desde libracos de medicina forense hasta manuales de balística. Era obsesivo.
- Precisamente, ¿qué aportación brinda a la historia su conocimiento sobre la historia del arte? ¿Y su conocimiento sobre perfiles criminales?
En realidad, lo que hicimos fue volcar parte de mis conocimientos artísticos no solo para conseguir verosimilitud en ciertos temas, sino también para dotar a “Crímenes Exquisitos” de un color diferente, de una cierta condición pictórica e incluso por momentos poética que no es habitual en una novela negra. En cuanto a mis conocimientos sobre perfiles criminales…palidecen ante la sabiduría de los de Vicente Garrido, no puedo decir otra cosa.
- La novela se desarrolla entre A Coruña y Londres. ¿Escenarios reales?
Los escenarios son totalmente reales, con licencias literarias, por supuesto. Nuestro deseo era que todos los escenarios tuviesen un tinte onírico, un filtro que los hiciese diferentes en cierto modo, dentro de la realidad..
- ¿Qué similitudes encontramos entre la inspectora Valentina Negro y usted; Vicente Garrido y Javier Sanjuán?
Valentina y yo, por desgracia, no nos parecemos en nada. Ella es una heroína a su pesar, una espléndida tiradora y tiene unos envidiables ojos grises, además de otros encantos. Quizá haya, aparentemente, más coincidencias entre Javier Sanjuán y Vicente Garrido, ambos profesores de universidad, ambos escritores, con un programa de televisión sobre perfiles criminales…Pero por lo que respecta a la trama principal, a las cosas que suceden a los personajes, es todo ficción.
-¿Que pueden encontrar en esta novela los amantes de la criminología?
Los amantes de la criminología encontrarán una investigación policial rigurosa, análisis de perfilación criminal, la mente del asesino en plena disección, tramas ágiles y trepidantes…en el momento en el que está Vicente Garrido por medio del asunto, se puede esperar de todo, y que ese” todo” sea muy brillante.
-¿Se pueden ver en estas paginas asesinos y asesinatos con un modus operandi que han sido reales?
Quizá haya algún parecido lejano con los crímenes del Carnicero de Milwaukee, Jeffrey Dahmer, pero muy, muy lejano. Yo creo que nuestros crímenes son realmente novedosos…
- Algo más que nos quieras contar…
Yo creo que “Crímenes Exquisitos” es una novela diferente, fresca, muy entretenida y muy trepidante. Una novela negra sexy y llena de morbo, un placer culpable que agarra al lector desde el prólogo con manos de hierro y no lo suelta hasta el final.