Bici y buceo, la combinación perfecta

Por Rafael @merkabici

Bici y buceo puede llegar a ser la combinación perfecta, e incluso ayudarte a mejorar tu rendimiento arriba de los pedales. ¿Alguien ha intentado bucear desde que comenzó a andar en bicicleta y sintió mejoras con el consumo de aire? Es mi segunda temporada que paso combinando el ciclismo y el buceo en Creta durante el verano. Después de obtener mi licencia de buceo no quiero salir del agua y he notado mejoras en mi capacidad de VO2 max y en mi capacidad anaerobica arriba de la bici.

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¿Planeas combinar la bici y el buceo?

Hay un serie de recomendaciones que debes seguir si planeas combinar la bici y el buceo y no precisamente es usar las gafas de buceo que usa Sagan arriba de la bicicleta.

Como factor de riesgo potencial para la enfermedad de descompresión, el ejercicio físico sigue siendo objeto de controversia. No solo es incierto el intervalo óptimo entre el ejercicio y el buceo, sino que el tipo y la intensidad del ejercicio en sí también son motivo de preocupación.

Recientemente, los investigadores han descubierto algunos datos muy interesantes sobre la relación del ejercicio con el buceo. Los cuales te compartimos a continuación.

Principales recomendaciones:

Tipo de ejercicio: se prefiere el ejercicio aeróbico moderado que no implique un esfuerzo excesivo de los músculos y las articulaciones; Se debe evitar el movimiento rápido (alta cadencia) de las extremidades. Si planeas combinar el ciclismo después de una inmersión recuerda hacerlo de manera ligera y sin alta cadencia.

Ejercicio antes y después del buceo: en general, el consenso entre los investigadores es que el ejercicio debe evitarse entre cuatro y seis horas antes y después del buceo. Anteriormente, esto se configuraba a las 24 horas, lo que no era práctico.

Ejercicio entre inmersiones: manténgase caliente y mantenga una actividad de bajo grado entre y después de las inmersiones. Esto facilitará la eliminación continua de gases sin provocar la formación de burbujas. No se recomienda dormir directamente después de una inmersión, ya que la circulación de las extremidades puede verse afectada y, si se presentan síntomas, es posible que no se reconozcan de inmediato.

Ejercicio durante el buceo: el objetivo es minimizar la absorción de gas y optimizar la desgasificación en las condiciones menos propensas a precipitar la formación de burbujas. Con esto en mente, se debe realizar un ejercicio mínimo durante el período de gasificación de una inmersión (es decir, durante el descenso y el tiempo de fondo).

Lo más importante:

El ejercicio suave y no extenuante (mover extremidades y nadar fácilmente) debe mantenerse durante el período de liberación de gases de la inmersión (es decir, durante el ascenso y en la parada de seguridad).

Sin embargo, es muy importante tener cuidado una vez que regrese a la superficie para evitar arrastrarse por las escaleras y minimizar la tensión excesiva en las extremidades y las articulaciones retirando el equipo de buceo pesado siempre que sea posible. Más bien aligere la carga pasando el equipo de buceo del agua al asistente antes de salir. Luego relájate el mayor tiempo posible antes de salir del agua.

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¿Qué dicen las investigaciones?

En 2006, un grupo de buzos realizó 10 minutos de ejercicio después de inmersiones en mar abierto de 30 m durante 30 minutos. La ecografía Doppler comenzó 20 minutos después de salir a la superficie, durante el ciclismo e inmediatamente después de la finalización del ejercicio. Sorprendentemente, este estudio encontró que incluso el ejercicio físico posterior a la inmersión redujo significativamente la formación de burbujas.

Los investigadores mencionaron en su conclusión que este resultado se obtuvo en buzos de la marina muy bien entrenados (físicamente en forma) y que se necesitarían hallazgos adicionales (es decir, una investigación más extensa) antes de que las conclusiones pudieran extrapolarse a los buceadores recreativos "normales". Nos hacemos eco de sus notas de precaución.

Aunque estos resultados de la investigación son alentadores, se necesitarán estudios a mayor escala en poblaciones de buceo más amplias antes de que las recomendaciones puedan aplicarse como práctica estándar. Los sujetos de investigación utilizados en estos ensayos claramente no eran representativos del buzo recreativo promedio.

Además, las condiciones experimentales exigían apoyo médico en el sitio, que no es el caso para la mayoría de los sitios de buceo recreativo. Cuando se trata de bucear, la fortuna tiende a favorecer a los conservadores.

Entonces es seguro realizar ciclismo después de bucear siempre y cuando siguiendo las recomendaciones principales. En fin, el buceo debe ser relajante. Así que ponte tus gafas de buceo, disfruta de las maravillas que ofrece y si te apetece sal a montar en tu bicicleta.

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