Eleanora Fagan Gough, que era el verdadero nombre de Billie Holiday nació tal día como hoy de 1915, por tanto habría cumplido si viviera 100 años, pero vivió muchos menos, Billie murió a los 44 años en el Hospital Metropolitano de New York, un 17 de julio de 1959 por complicaciones respiratorias. Llevaba en arresto hospitalario desde el 12 de junio por posesión ilegal de narcóticos. Había llevado el micrófono de jazz a un lugar solamente superado por sus dos grandes influencias, Louis Armstrong y Bessie Smith.Su madre, Sadie Fagan, tenía sólo trece años cuando nació Billie y su padre Clarence Holiday, un guitarrista y bajista de jazz que tocó en la orquesta de Fletcher Henderson, tenía quince. Sobra decir que era una niña no deseada. Su madre, excesivamente joven para la responsabilidad, abandonaba con frecuencia a la niña con parientes de no muy buena reputación. La niña fue enviada a una escuela católica a la edad de diez años, después de haber admitido ser violada. En New York, ayudaba a su madre en trabajos de ayuda doméstica y empezó a ejercer la prostitución.A principios de los años 30, Billie ya cantaba con frecuencia en varios clubs de New York y empezó a unirse a grandes talentos como Benny Goodman. Su descubrimiento por el productor John Hammond fue clave. Cuenta el mismo John Hammond, su descubridor, que la jóven Billie Holiday era una mujerona, en 1933 “pesaba casi cien kilos y era increíblemente hermosa”. En 1959, cuando falleció, con 44 años, había quedado reducida a una ruina, “una pequeña y grotesca caricatura de sí misma”. En esos 25 años Billie fuera de los escenarios patinó y mucho, ya que cayó en las drogas y le retiraban la tarjeta para actuar en los clubs, algo mortal para la gente del jazz de la época.
Eleanora Fagan Gough, que era el verdadero nombre de Billie Holiday nació tal día como hoy de 1915, por tanto habría cumplido si viviera 100 años, pero vivió muchos menos, Billie murió a los 44 años en el Hospital Metropolitano de New York, un 17 de julio de 1959 por complicaciones respiratorias. Llevaba en arresto hospitalario desde el 12 de junio por posesión ilegal de narcóticos. Había llevado el micrófono de jazz a un lugar solamente superado por sus dos grandes influencias, Louis Armstrong y Bessie Smith.Su madre, Sadie Fagan, tenía sólo trece años cuando nació Billie y su padre Clarence Holiday, un guitarrista y bajista de jazz que tocó en la orquesta de Fletcher Henderson, tenía quince. Sobra decir que era una niña no deseada. Su madre, excesivamente joven para la responsabilidad, abandonaba con frecuencia a la niña con parientes de no muy buena reputación. La niña fue enviada a una escuela católica a la edad de diez años, después de haber admitido ser violada. En New York, ayudaba a su madre en trabajos de ayuda doméstica y empezó a ejercer la prostitución.A principios de los años 30, Billie ya cantaba con frecuencia en varios clubs de New York y empezó a unirse a grandes talentos como Benny Goodman. Su descubrimiento por el productor John Hammond fue clave. Cuenta el mismo John Hammond, su descubridor, que la jóven Billie Holiday era una mujerona, en 1933 “pesaba casi cien kilos y era increíblemente hermosa”. En 1959, cuando falleció, con 44 años, había quedado reducida a una ruina, “una pequeña y grotesca caricatura de sí misma”. En esos 25 años Billie fuera de los escenarios patinó y mucho, ya que cayó en las drogas y le retiraban la tarjeta para actuar en los clubs, algo mortal para la gente del jazz de la época.