Con su propia firma, o bajo seudónimos, el guitarrista texano nos muestra sus grandes delicias aderezadas a las seis cuerdas de su guitarra, con un empiece totalmente espectacular en la canción "Missin' Yo' Kissin'", su "My Baby She Rocks", o el tema que bien podría haber pertenecido a un disco de su banda materna durante la década de los años ochenta, "Second Line". El sonido de Blues pantanoso reproducido a su sabiduría con "Standing Around Crying", teniendo el filo una armónica, y una fuerte influencia al sonido Delta escrita por el gran Muddy Waters.
No me gustaría dejar sin mencionar la sutileza de Jerome Green en "Bring It to Jerome", un percusionista y maestro con la tuba, con el que contaron durante la década de los años 50 del siglo pasado para la Chess records. El cual llego a tener mucho renombre dentro del sello, llegando a aparecer en los discos de Bo Diddley, o Chuck Berry además de Willie Dixon entre otras grandes figuras; pero esto es una gran historia que ya os contare en el blog de "El demonio viste de Blues".
Con "That's What She Said", "Mo' Slower Blues", y "Hollywood 151" firma sus canciones más puristas, las cuales las lleva a una nueva dimensión, siempre en la línea de su Blues-Rock, si es que escuchar la propia música de Billy F Gibbons es como saborear un trago de licor añejo, esa barrica, que aunque en cuerpo ya se haya apreciado en muchas ocasiones anteriores, siempre tiene un tacto nuevo, por el cual ha llegado a firma canciones tan impresionantes como esta.
En su nuevo disco no podría llegar a faltar "Rollin' and Tumblin'", un Blues básico del pilar del sonido Delta, la canción ha sido interpretada en muchísimas ocasiones, y su autoría se la han dado a Muddy Waters bajo otros sinónimos. Terminando el álbum con "Crackin' Up" de Ellas McDaniel., mejor conocido como Bo Diddley.