Bajo este título tan técnico quería hablar sobre un tema que parece que está empezando a aparecer poco a poco en los medios de información. Pese a que ya prácticamente todos estamos de acuerdo en la neutralidad del ciclo de carbono en la biomasa, tenemos el debate de la calidad de las emisiones en el lugar de consumo de la misma.
Hace unos días escribí un post resumiendo las jornadas sobre biomasa que se desarrollaron en el entorno de la feria Genera 2014
. En una de las ponencias, José Antonio Pérez, responsable del área de biomasa de CTAER , nos advirtió que el desarrollo de la biomasa térmica estaba supeditado al buen hacer en temas de calidad y certificación tanto de la biomasa, ya sean pellets o astillas, como de las calderas.
La importancia de la certificación es tal, que puede ser el factor determinante que decida si la biomasa térmica entra a competir directamente con el Gas Natural. Desde el sector Gasista se empieza a hablar de las emisiones en la combustión de la biomasa y de lo limpia que es la combustión del Gas. Es por esto que, antes de que se produzcan corrientes de opinión negativas desde algunos foros hacia la biomasa,debemos poner remedio al asunto y que no nos ocurra como con el debate de las energías renovables en general.
Nuestro deber en el sector es trabajar por una biomasa de calidad, que esté regulada o certificada, por ejemplo por los sellos promovidos por Avebiom, como EnPlus o Biomasud y exijamos el mismo rigor en nuestras calderas, promoviendo el uso de calderas de baja temperatura y condensación de manera que la mitigación de emisiones en la combustión haga inexpugnable el flanco que se intenta atacar desde otros sectores.
En próximos posts profundizaremos en las emisiones de la combustión, calidad de las calderas de biomasa y la certificación de los biocombustibles sólidos.