Editorial: GuadalmazánISBN: 9788494471728
Páginas: 286
Tras años de estudio con una profundidad sin precedentes, las posibilidades que nos ofrece hoy en día la biotecnología para comprender una planta hasta su nivel celular y molecular, permiten aprovechar muchas de estas características de un modo antes inconcebible. El potencial biotecnológico descubierto en las plantas está revolucionando su forma de utilizarlas, y abre nuevas posibilidades para el futuro, con un notable impacto en diversos sectores productivos. De entre ellos destaca la agricultura por ser la fuente principal de alimento para la humanidad, pero no es el único.
El objetivo de este libro es dar a conocer estas nuevas posibilidades que la moderna biotecnología vegetal nos brinda, creando las plantas que nos vamos a comer, que vamos a ver, y de las que nos vamos a servir... las plantas del futuro.(Sinopsis de la editorial)
Como ocurre periódicamente en el blog, y coincidiendo con la reactivación de mi vena científica, hoy os traigo la reseña de un libro de divulgación editado por Guadalmazán, y que viene avalado por el premio Prismas Casa de las Ciencias a la Divulgación 2010 en la categoría "Mejor texto inédito".
Seguramente cuando habéis visto que este libro trata sobre el mundo vegetal, muchos de vosotros habréis pensado que será un tanto aburrido, o sólo apto para los realmente interesados en el tema. Sin embargo, yo os aseguro que no es así: con esta lectura he descubierto que las plantas son unas grandes desconocidas para la mayoría de la gente, pero con unas posibilidades inmensas, y Seguí Simarro nos detalla cuáles son estas posibilidades con todo detalle.
Son muchos los temas que se tratan en el libro: la revolución verde, los biocombustibles vegetales, el poder curativo de las plantas medicinales,... Pero quizá el más interesante y controvertido sea el de los vegetales transgénicos; actualmente hay un gran rechazo hacia este tipo de vegetales, sobre todo si están destinados al consumo humano, pero el autor nos asegura que en su producción no hay nada improvisado, que todo está perfectamente regulado y hay mecanismos de seguridad.
José María Seguí Simarro
Seguí Simarro nos habla, por ejemplo, del arroz dorado, un tipo de arroz transgénico que lleva beta-caroteno para que el organismo sintetice vitamina A, algo muy beneficioso para los pueblos cuya alimentación está basada casi únicamente en el arroz. También nos cuenta que en el año 2010, en Córdoba, se consiguió un trigo en el que están inactivados los genes responsables de la producción de las proteínas tóxicas para los celíacos. Este trigo aún no nos ha llegado; el CSIC ha tenido que vender la patente a una empresa extranjera por las barreras burocráticas de la Unión europea y su negación a los transgénicos. En este libro se asegura, con datos científicos, que el mundo de los transgénicos no es tan negativo como lo pintan; al contrario, tiene muchísimos aspectos positivos. Pero no sólo nos muestra las luces, sino también las sombras de este tipo de productos.Esta lectura me ha resultado interesantísima. Quizás sea un poco más densa que la de otros libros de esta colección, como El científico que derrotó a Hitler o El encantador de saltamontes, pero aunque haya que poner una mayor atención merece mucho la pena, ya que vamos a aprender mucho sobre un mundo a priori desconocido para la mayoría.