Jueves 12 de Marzo de 1997
Esta es la bitácora del soldado Matt McWood. Este texto va dirigido a Claire.
Querida Claire.
Antes no pude escribirte, estábamos en una misión de reconocimiento y tuvimos que buscar refugio, nos iban a emboscar, Max fue interceptado por uno de ellos, él fue alcanzado y le dispararon en una pierna dejándolo débil, en ese momento tuvimos que dejarlo allí tirado porque quizá suene mal, pero segpun nuestro supervisor era una carga para nosotros. Además de ello fuimos entrenados a no ser estorbos en las misiones, en determinado caso de quedar incapacitado para continuar tenemos dos opciones: Seguir luchando solo y esperar una muerte honorable o simplemente dispararse antes de ser secuestrado por el enemigo y ser torturados para sacarnos información. Esto lo dijeron el primer día de nuestro entrenamiento.
Después de dejar abandonado a Max, a lo largo de unos 500mts escuchamos el eco de un disparo, así fue el primer día de nuestra misión, ahora con 19 de nosotros en un campo donde todos eran nuestros enemigos, estábamos allí, a la deriva, la verdad no entiendo que hacemos en ese lugar, a veces pienso que solamente es una misión suicida para justificar cualquier tipo de error de algún general, quien sabe si sabrán de nuestra existencia puesto que las comunicaciones con la base hasta el día de hoy desaparecieron.
Lo único que tenemos son nuestras pertenencias y unas placas que nos identifican. La misión consistía en llegar a una depósito de armas y destruirlo con unas granadas que nos quedaban, ese lugar era uno de los depósitos donde más armas guardaban, lo mismo que la munición, al ser uno de los mejores lugares, la seguridad era bastante y teniamos que ser demasiado cautelosos, necesitamos de crear un perímetro y tener francotiradores que vigilaran los movimientos de los guardas para poder encontrar un momento para realizar nuestro plan.
Tristemente, el plan falló y tuvimos que entrar de una manera abrupta y perdimos a 5 más, gracias a Dios pudimos destruir ese depósito y salir con vida, pero en el camino nos eperaban más sorpresas.
Nuestras municiones están bajas y nos estamos quedando sin comida, muchos de nosotros ya no aguantamos tanta presión al soportar esta guerra en nuestros hombros. Dos días despues Mason y Alexander se suicidaron porque no supieron lidiar con el estrés, este tomó el control y terminó con su agonía de la peor manera. De 20 que éramos, ahora quedamos solamente 12, por decirlo así, estamos quedando los mejores en nuestros campos y los más fuertes, con una voluntad inquebrantable. Lo que me mantiene a mí en pie, eres tú Claire y el saber que cuando todo esto acabe podemos comenzar una vida juntos. Construiría un hogar para nosotros, te haría feliz y seríamos solo tú y yo. Esto es lo que me levanta y me fortalece cada vez que mi cuerpo intenta fallar y mi voluntad se intena quebrar.
Te amo demasiado. Espero volver a escribirte pronto.
Matt McWood.