Como estamos en Costa Rica pues utilizo bananos, aquí los plátanos son bastante grandes y los hacen la horno, fritos o para hacer otras cosillas que ya os iré contando, pero con nuestros Plátanos de Canarias será perfecto.
Primero las fotos de los bananos.
El único problemilla es que todos maduran a la vez y llega un momento que no sabes qué hacer con ellos...bueno sí, muuuuchos bizcochos y otras cosillas.
Batimos bien 4 huevos con un chorro de aceite de oliva virgen extra suave y 100/150grs de azúcar (según lo dulce que lo queramos).
Mezclamos 220/250 grs de harina (es que a veces depende de los huevos, del chorrito de aceite...no siempre te admite lo mismo), el sobre de levadura, una pizca de sal y una cucharadita de bicarbonato y lo vamos tamizando (en mi caso con un colador, ja, ja) sobre los huevos y el azúcar batidos.
Aparte aplastamos con el tenedor 4 bananos, dependerá del tamaño, aunque al decir bananos pensamos en tamaño grande, hay diferentes variedades y algunos son hasta más pequeños que nuestros plátanos, no os importe poner más yo a veces he puesto hasta 5 medianitos y ha salido fenomenal, eso sí que estén maduritos y le añadimos vainilla, resulta que aquí la esencia de vainilla es líquida y de color marroncillo por lo que la mezcla y el bizcocho nos quedará oscurito pero la vainilla le da un buen toque.
Lo mezclamos todo bien y echamos por encima unos trozos de nueces, las mías son del nogal que teníamos en Santiago de Chile, ya van quedando poquitas... y al horno, lo de siempre, unos 180º, 30/40min.
Ya veréis lo cremoso que queda por dentro.