Como no podía ser de otra manera, desde la Wasabi Manor os comentamos lo que nos ha parecido por el momento esta original y extraña serie que seguro que va a traer cola.
Con un rompedor e hilarante punto de partida, la nueva animalada del actual Rey Midas british Charlie Brooker (lo podéis conocer por la sobrevalorada Deat Set o la recomendable Spoons), Black Mirror es una miniserie de tres capítulos en los cuales se palpa la crítica a las redes sociales, la tecnología y la sociedad 2.0 actual.
Por el momento os hablamos del polémico The National Anthem, primer capítulo que a los amantes de terror psicológico no defraudará.
Secuestrada por un grupo de terroristas, la popular Princesa Susana (apodada Princesa de Facebook y de tropecientas causas sociales muy al estilo de Lady Di) sólo será liberada si el primer ministro británico accede a cumplir un requisito (que tiene bastante miga, todo sea dicho).
El vídeo con la petición y la amenaza de asesinar a la muchacha corre como la pólvora por las redes y todos los medios se lanzan a la yugular para lograr la exclusiva datos o información.
Las redes se mofan, la gente se pega al televisor y el flujo informativo, aun siendo escaso, no deja de llenar las parrillas de la caja tonta con debates y encuestas absurdas.
Pero la cuenta atrás ha empezado y el secuestrador no se andará con tonterías. Con su peculiar savoir faire logrará girar las tornas de la forma más impensable que hay. Además, sobre el primer ministro caerá toda la presión: será obligado por su partido y por todas las instituciones a tomar una determinación.
Los últimos minutos son brutales, humillantes y aberrantes. Creo que no hay palabras para definir el circo que se orquesta para salvar a la princesa. El morbo de los medios, la bajeza de la sociedad, el mal uso de la información y de las nuevas tecnologías... Más crítica que retrato, pero muy logrado.
Menudo desenlace, damas y caballeros... Si os gustan las emociones fuertes, echad un vistazo a la serie; os dejo con el trailer.