Acabo de enterarme de la noticia. Blake Edwars, uno de los reyes de la comedia, y el último que podemos considerar así, murió ayer jueves en la ciudad de Los Ángeles, a causa de una neumonía.
Tenía 88 años, y nos deja títulos inolvidables.
Se le recordará por sus espléndidas comedias, y títulos como “Operación Pacífico”, “La pantera rosa”, “El guateque” “Desayuno con diamantes”, “10, la mujer perfecta” o ¿Víctor o Victoria?, que ocupan un honroso lugar en la historia del Cine, siempre permanecerán vivos para nosotros.
A lo largo de su carrera nos demostró que no tan sólo en la comedia ligera podía realizar buen cine. Dirigió ese extraordinario drama que toca el tema del alcoholismo, que es “Días de vino y rosas”. Con gran acierto, y en el género de suspense nos ofreció “Chantaje a una mujer”, y también en el western nos demostró su calidad con “Dos hombres contra el oeste”.
Estaba casado desde hace 41 años con la actriz Julie Andrews, a quien dirigió en siete ocasiones.
Un grande ha desaparecido, pero nos deja un gran legado para seguir disfrutando con el.
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