Ahora, todos los suplementos culturales hablan de la, por fin, publicación del libro que aún tenía inédito: 'Hojas de Madrid con La galerna'; alguno de esos suplementos había tenido la osadía de decir que, además, era un libro que permanecía totalmente inédito...quién sabe, es posible que no hayan leído la edición de 'Verso y prosa' que le hizo la editorial Cátedra.
Yo he decidido leerme primero los libros suyos que aún no me había leído, y he comenzado por sus 'Historias fingidas y verdaderas', un libro, en mi opinión, sencillamente imprescindible.
PROSA
Las maneras de manifestarse el espíritu son diversas, pero una sola su consecuencia. Aspiramos a la belleza, siempre que no esté en contraposición a la verdad, es un decir a la justicia. (Pero alguien dijo: rien n'est vrai que le beau.) Aspiramos a eso, mas siempre hay contrapuntos y sobrecomas que nos impiden reconocerlo. (Mas no hay incompatibilidad.) Dígalo en lenguaje conversacional, verá como el diálogo es imposible. Estáis abusando de vuestra falta de facultades.
Es así que la mañana extiende su página ilustrada, un poco de azul y todo pasa ante los ojos como en un poema de Blok. Chillan las vecinas haciéndose imposible todo simbolismo más acá de la tendedera.
No da lo mismo el tamaño de los renglones ni la longitud de la sintaxis. Después de la revolución de 1905, Blok extendió su diafragma y la prosa siguió donde estaba, a mil verstas del ritmo –ritmo libre, verso libre, encadenados entre sí–, pero no abusen de sus facultades inesperadas. Porque el verso se hizo hombre no quiere decir que cualquier ciudadano alcance el don –así se llamaba, antes de Baudelaire, a mi mesa de trabajo.
ESCRUTINIO
Por todas partes, libros. Literatura, literatura. Libros de historia, libros de viajes. Por todas partes, paredes de papel, mesas de papel, flores de papel. Libros de filosofía, libros de economía. Y literatura, literatura. Crítica. Física. O sobre cine, sobre el mar, acerca de los pájaros. Y poesía, poesía primitiva y de la Edad Media, poesía del siglo de oro, de qué siglo; poesía de mañana.
He derribado montones de libros que me impedían andar, encontré en otros verdades que presentía y en otros palabras dispuestas de modo distinto. Veinte, treinta libros que vuelvo a abrir y a mirar de cuando en cuando, cada vez más cauta y pausadamente...
EL AIRE
El aire mueve levemente las páginas del libro, ésta es una de sus misiones principales; desconfiad del libro encerrado en sí mismo, de las sabias o hermosas palabras que se agostan al simple contacto del aire.
El aire cambia sus billetes a cada paso, billetes verdes del mar con la vuelta de las olas, monedas de cobre del otoño que suenan a nuestro paso matinal por el Luxemburgo.
El aire es la imagen de la libertad, sin estatuas tramposas ni antorchas trasnochadas. Balancea las altas ramas de las palmas a 90 millas de los millonarios miserables.
El aire es sabiduría y música del entendimiento. No hay diálogo posible si al aire falta, entonces la atmósfera se enrarece y el ciudadano se entontece.
Blas de Otero. 1980. Historias fingidas y verdaderas. Madrid, Alianza Editorial.