Blogueros del mundo, uníos contra la corrupción…

Es triste para mi darme cuenta que Carlos Monsiváis era uno de los críticos más fuertes contra los desfiguros del poder. Es triste pues yo me considero un crítico de los desmanes gubernamentales, nada me molesta más que la hipocresía y la demagogia. Carlos, te leí muy poco, solo algunas de tus columnas, ninguno aún de tus libros. Probablemente la cuestión que más me alejó de tus escritos es que te hayas unido a Andrés Manuel y dudo que tuvieras la razón de apoyar a un corrupto mesiánico como es el Peje. Estoy de acuerdo que critiques al PRI porque de ellos heredamos los problemas estructurales que nos aquejan hoy en día, y es correcto que critiques al PAN pues allí se agrupan muchos de los empresarios que explotan a la clase trabajadora, pero aunque tuviste todo el derecho de apoyar a quien te viniera en gana, déjame comentarte que Andrés Manuel, y como bien lo sabías, es tan solo un excremento de dinosaurio priísta, un golpeador sin neuronas, un títere de políticos sin ética como lo son Manuel Camacho Solís y Manuel Barttlet, entre otros tantos, por lo eso me alejé de tu obra.

Me hubiera gustado preguntarte en persona que opinabas de que Andrés Manuel haya escondido ‘legalmente’ el costo de los segundos pisos de a ciudad de México, te hubiera preguntado por el señor de las ligas (Bejarano) y te hubiera pedido una explicación sobre los taxis piratas que comanda Martí Batres y los ambulantes de esta persona de apellido Barrales; cuanta mierda detrás de un solo hombre como es Andrés Manuel. ¿Porqué tratabas de legitimarlo?

Pero en fin, esto ya es agua debajo del puente para ti, a los que nos quedamos nos toca seguir tu labor, aunque nunca tengamos la calidad que tu le demostraste a muchos mexicanos.

En virtud de que te has ido y dada la importancia que tiene el no dejar solos a los gobernantes, pues ya dice el viejo refrán: Autoridad otorgada y no supervisada vale para pura chingada. Considero que somos muchos los que debemos hacer el compromiso de escribir constantemente en contra de los desfiguros del poder.

No podemos, no debemos darles un respiro a los malos gobernantes, así se roben un peso o millones, la cuestión es la misma, no debemos permitir que nos roben más, al final del día no es a mi, ni a ti quien me lees en este momento los mayores perjudicados de manera directa, son las miles de personas que no tienen un desayuno caliente, la oportunidad de ir a la escuela o la bendición de un trabajo bien remunerado a quienes más daño hacen los políticos rateros de nuestro México.

Carlos, desde donde estés mándanos la capacidad de criticar de manera diestra a los malos políticos, préstanos dardos envenenados para que todo corrupto caiga de bruces ante nuestros escritos y mándanos inteligencia para evitar calumniar a quien no lo merece.