Solo voy a hablar de Cate Blanchett. No, perdón. De la gran Cate Blanchett. De esa gran mujer que se come la pantalla como una fiera y que consigue angustiarte durante 98 minutos con su patética situación y su desequilibrada mente. El personaje es bueno, realmente bueno, y en manos de la Blanchett queda perfecto. ¿Que va a ser nominada al Oscar? Muy bien, yo se lo daría desde ya.
No tengo ni idea de si la película es buena o mala. Eso es un hecho. Me quedé tan obnubilada con lo bien construida que está Jasmine que volvería a verla diez veces más para seguir su arco dramático. Es de esas películas que merece la pena ver solo por seguir a la rubia en su bajada a su infierno personal. Eso sí, un infierno al que en manos de Allen no le falta humor ni perspicacia.
Enhorabuena al Allen escritor (que una vez más vuelve a brillar con la creación de un personaje femenino) y a la Blanchett intérprete (¡ese Oscar!).