Al diseñar el Bluetooth, que técnicamente podemos definir como una especificación industrial que posibilita la transmisión de voz y datos entre diferentes dispositivos mediante un enlace por radiofrecuencia, Jim Kardach lo bautizó así en honor del rey danés y noruego Harald Blåtand. La traducción al inglés del nombre del soberano sería Harald Bluetooth. Pasó a la historia por unificar las tribus noruegas, suecas y danesas y por convertirlos al cristianismo. De la misma manera que el protocolo de telecomunicaciones ha unificado la intercomunicación entre PDAs, teléfonos móviles, computadoras portátiles, ordenadores personales, impresoras o cámaras digitales.
El logo de Bluetooth son las runas de las iniciales del nombre y el apellido de Harald Blåtand: Hagall y Berkana.alfonsovazquez.comciberantropólogo