Cerrando la primer rueda de la fase de grupos de la Copa Libertadores de América, Boca Juniors recibía a Nacional de Uruguay con la posibilidad de quedar puntero en el Grupo 1 y afrontar la segunda rueda con cierta tranquilidad. En un partido que a priori se planteaba como complicado, el Xeneize dejó pasar una gran oportunidad y perdió por 1 a 0 con el gol de Scotti. Cabe destacar que el equipo visitante jugó con 10 hombres desde los 73 minutos, por la expulsión a Lembo.
Boca arrancó mejor, ya que antes de los cinco minutos tuvo una chance de riesgo con un tiro libre de Riquelme que Pérez no llegó a empujar. El local comenzó proponiendo pero se diluyó rápidamente, y Nacional aprovechó la volteada: a los 20 minutos, Scotti conectó un córner desde el primer palo, anticipando a Pérez, para poner el 1 a 0. El equipo charrúa se ponía en ventaja rápidamente y complicaba al conjunto de Bianchi.
El Xeneize podría haber descontado sólo un minuto más tarde, tras una doble chance de Pérez y Ribair Rodríguez, pero faltó efectividad y suerte en la definición. Antes del fin del primer tiempo, hubieron solamente dos chances más, ambas para el local. Primero lo tuvo Erbes con un disparo lejano que se fue rozando el palo, y luego la chance fue del “Burrito” Martínez con una jugada individual, pero Bava rechazó el tiro con efectividad.
Durante la segunda etapa, el juego se inclinaría hacía el área del visitante, pero casi sin ocasiones de gol manifiestas. Boca adelantó sus líneas, y Bianchi hizo ingresar dos delanteros más, quedando con Acosta, Viatri, Martínez y Blandi arriba; pero ni siquiera así pudo cambiar el cero en el marcador. El Xeneize propuso más que un Nacional acorralado, que cada tanto apostaba al contraataque, y no le alcanzó con eso.
A los 73, tras una protesta airada hacia Amarilla, Lembo se fue expulsado en el equipo uruguayo. Boca pudo aprovechar esta situación, pero el conjunto visitante fue lo suficientemente inteligente como para cerrar la defensa y estrechar las líneas, de forma que el Xeneize no podía arremeter hacia el arco contrario. Cerca de los 85 minutos, Boca pudo empatar con una gran jugada de Erbes, pero su remate se desvió en un defensor y la pelota se marchó por el fondo.
Finalmente, el equipo argentino no pudo torcer el resultado y se llevó un duro 0-1. El resultado dolió, lógicamente, por una cuestión matemática para la clasificación, pero también por la falta de actitud. Hace varios partidos que Boca no encuentra su norte, y se lo nota desorientado. Apenas pueden rescatarse un par de actuaciones; la más clara entre todas es la de Erbes, que juega de todas las posiciones posibles, pero no mucho más. Es preocupante ver que Riquelme, tras ocho meses de parate y sin pretemporada, corre y juega más que varios jugadores que vienen en actividad. Es una incógnita como hará Bianchi para corregir esta falta de fútbol, pero hay una certeza rondando: debe hacerlo urgente.