Llevo unos días con mucho estrés en el trabajo y eso a veces hace que no tengamos ganas de nada, llegamos a casa apáticos, y lo que menos nos apetece es ponernos a cocinar verdad?
Pero ya sabéis que como siempre os digo, muchas veces no hace falta complicarnos excesivamente la vida ni para preparar una rica cena o para darnos un caprichito.
Hoy os traigo unos bocaditos de camembert que son lo más fácil del mundo y están taaaaan buenos.... yo los he preparado con mermelada de tomate, pero podéis hacerlos con la que más os guste: de fresa, de melocotón....
Ingredientes:
- 1 queso camembert
- harina
- dos huevos
- pan rallado
- aceite de girasol
- mermelada de tomate
Preparación:
Dividimos el queso camembert en ocho porciones.
Ponemos a calentar el aceite de una sartén.
Batimos los huevos. Pasamos las porciones de queso en primer lugar por harina, después por huevo y finalmente por pan rallado.
Yo los empano dos veces para que al freír no se escape el queso al fundirse. Es decir, volvemos a pasar por huevo y por pan rallado.
Freímos en abundante aceite que habíamos puesto a calentar. Con 30 segunditos por cada lado estará listo.
Servir acompañado de la mermelada de tomate.
Que bien sienta darse un gusto así!!