Bocairent: enclavada en la historia y adornada por la Serra de Mariola

Por Eva Maria Martinez Reinoso

Fuentes que refrescan el recorrido


Asomarse a Bocairent y mirar al horizonte, desde cualquier punto cardinal, es trasladarse en el tiempo. Recorrer sus calles y refrescarse en sus fuentes que datan de 1794 y que hacen el recorrido por sus estrechas y empinadas calles mucho más llevadero, es algo que sus habitantes, allá por el siglo XVIII ya sabían. 

Existe una ruta para recorrer el barrio medieval llamada la Ruta Mágica que nos permite hacer la ruta por el exterior a los que vayan acompañados de carritos. Para los que prefieran callejear será un recorrido también mágico ya que podremos, entre otras cosas, colarnos en una antigua casa medieval de reciente descubrimiento y que nos muestran cómo eran las viviendas para la población de aquella época. No hay que olvidar que el barrio medieval de Bocairent fue declarado conjunto histórico-artístico nacional el año 1975. Su especial orografía de casas apiñadas le da un aspecto muy peculiar, con sus calles estrechas y escalonadas, como la calle de "les Voltes", la calle de Sant Joan o la calle de "l'Emboç".

Carrer de les Voltes

Restos de una casa medieval






       Como sabían los musulmanes, que también poblaron esta pequeña joya de la Serra de Mariola, guardar y mantener alimentos escondidos dentro de la roca de la montaña para poder sobrevivir en periodos de guerras y expulsiones como se puede apreciar al visitar les Covetes dels Morosy contemplando las decenas de pequeñas ventanas que hay cavadas en la montaña. De su paso por Bocairent son también su riqueza gastronómica donde los dulces de origen árabe son, sin duda, un delicioso recuerdo que será difícil de olvidar.

Pont de Darrere de la Vila

También sabían los romanos cómo facilitar el acceso para el comercio, de un pueblo en medio de la montaña y cercado por el rio Clariano, para lo que construyeron  dos puentes romanos que aun todavía permanecen en el tiempo, uno en el Mas de Giner y otro cerca del caserío del Alboret. Pero Bocairent conserva 10 puentes de distintas épocas de la historia que nos obligan a hacer un recorrido sólo con ellos como protagonistas.

Desde el campanario

No podemos olvidarnos de la gran tradición religiosa de un pueblo donde unos 4.000 habitantes conviven con múltiples construcciones religiosas como la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, una iglesia impresionante de cuna Románica que tras varias mutilaciones en su historia, ha adquirido unas características particulares debido a sus reconstrucciones con los gustos y las modas de las distintas épocas transformándola en Gótica y con   una  decoración interior tremendamente Barroca,  y cuyo campanario es el gran vigía que todo lo controla con sus cinco campanas. Te animo a subir a lo alto y conocer a Santa Bárbara, a Teresita, a San Blai o a la pareja José y María. 
 El Convento Monasterio de Bocairent, excavado en la piedra, data del siglo XVI y aunque ha padecido diversas modificaciones no deja de sorprender al visitante cuando entra en su pequeño habitáculo de 48 metros y mira el increíble techo.

Ermita del Santo Cristo

 Tampoco podemos  olvidar sus 10 ermitas, encabezada por la del Santo Cristo, encaramada a la cima de la montaña y cuya visión, desde el mirador, se asemeja a un lienzo pintado con grises y sombras.
No es posible describir Bocairent sólo como una joya arquitectónica donde cada civilización de la historia ha dejado plasmada su huella. A Bocairent llegan el olor de la salvia, el romero y el tomillo, del espliego y la pimentera y refrescan las sombras de las carrascas y los fresnos. Bocairent, enclavado en plena Serra de Mariola con categoría de Parque Natural, ofrece, sin duda, rincones maravillosos en plena naturaleza, rutas para el senderismo, zonas para el baño con cascadas de aguas cristalinas o rutas donde poder practicar cicloturismo dentro de la Via Verde de Xixarra. Pero todo eso bien se merece otro capítulo en nuestra particular historia. Te invito a volver.

Fuente: Tourist Info Bocairent      Turismo Bocairent