BOLETÍN INFORMATIVO Nº91 Julio de 2018
IN MEMORIAM
Jesús García Corcuera +27 de mayo de 2018
Gracias padrecito Jesús Fue el pasado domingo, 27 de mayo, celebración de la Santísima Trinidad, cuando nos dejó el padrecito Jesús, párroco de Grañón, se marchó a peregrinar al más allá hacia el encuentro con el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. Llegó a Grañón el 10 de octubre de 2010, tuvimos el inmenso privilegio de tenerle como cabeza visible del albergue hasta finales de este mes de febrero, donde la enfermedad ya le obligó a retirarse. Durante este tiempo habrán pasado por Grañón unos 350 hospitaleros. Puedo asegurar que todos ellos terminaban su quincena conmovidos y encantados de haber podido conocer a un sacerdote como Jesús. Fuesen del país que fuesen, hablasen la lengua que hablasen, creyentes o no, Jesús siempre les acogía con una gran sonrisa y con mucha comprensión. ¡Algo muy gordo tenía que haber pasado para que se quejase sobre algún hospitalero! Pero eran ellos, los hospitaleros, quienes siempre me comentaban cómo les llegaba su gran bondad, y lo bueno que era. Y era verdad, lo he repetido muchas veces estos días, Jesús era el hombre más bueno que he conocido en esta vida, y estas palabras no sólo me las oiréis a mí, sino a muchos de los habitantes de Grañón, fuesen a misa o no, y a muchas de las personas que han tenido la suerte de conocerle. Precisamente en su funeral, el evangelio del día era el del joven rico (Mc 10, 17- 20) «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le contestó: ¿Por qué me llamas bueno? No hay nadie bueno más que Dios» Conociendo la humildad de nuestro padrecito Jesús, estoy segura que al leer las palabras que he escrito sobre él, me hubiera respondido con las mismas palabras que usó su tocayo. Será verdad, no hay nadie más bueno que Dios, pero fuiste un formidable testigo, ejemplo e intermediario de la bondad de Dios. Siempre le recordaré en el coro cuando se pasaba la vela peregrina, con mucha frecuencia solía cantar: “ ¡Qué detalle Señor has tenido conmigo! Cuando me llamaste, cuando me dijiste que tu eras mi amigo” Pues solo puedo terminar estas líneas diciendo: “¡Qué detalle Señor has tenido con nosotros de mandarnos a Jesús a Grañón!, Gracias por poder conocerle y compartir casi ocho años con él”. Esperamos tomar su relevo y seguir atendiendo a los hospitaleros y a los peregrinos con su ejemplo, con su bondad, y con tanta ternura como él lo hacía.
Marina Sáiz Hoz Martin Wirsching +12 de julio de 2018
El pasado 12 de julio, a las ocho de la tarde falleció Martin, peregrino y hospitalero, a causa de una enfermedad hepática. Martin Wirsching era de Offenbach (Alemania) pero vivía en Ponferrada. Estaba casado con Marilene Marcondes, de Sao Paulo (Brasil), también peregrina y hospitalera. Martin fue hospitalero en el albergue parroquial de San Nicolás de Flüe, en Ponferrada, entre los años 2000 y 2003. También lo fue en el Apóstol Santiago de El Acebo, siendo el primer hospitalero del albergue en 2007. La asociación de Amigos del Camino de Santiago de El Bierzo, nos ha informado de esta pérdida –muchos que hemos sido hospitaleros en Ponferrada recordamos a Martin y a Marilene- y desde aquí pedimos para él una oración.
El regalo de la armonía, la paz y la confianza de Taizé
Del 24 junio al 1 de julio nueve hospitaleros respondimos a la llamada que se hizo en este boletín para acudir a Taizé. Nada más llegar, en la recepción, se nos dio una hoja que decía: “Venir a Taizé es una oportunidad para buscar la comunión con Dios por medio de la oración comunitaria, el canto, la reflexión personal y el compartir. Cada uno está aquí para descubrir o redescubrir un sentido a su vida y tomar un nuevo impulso. Venir a Taizé supone prepararse para asumir responsabilidades de regreso a casa, con el fin de ser portadores de paz y confianza”. Nosotros íbamos abiertos a lo que nos podía pasar, pero también con nuestros miedos: que si el idioma, que si a ver cómo encaja el grupo… y al final esa paz y esa confianza que se siente en Taizé, se te mete en las venas, olvidamos de nuestros miedos y volvimos entusiasmados y satisfechos por haber vivido esta experiencia.
Al igual que pasa en el Camino de Santiago, una de las enseñanzas más evidentes que uno aprende en Taizé es cómo es posible la armonía en la variedad. Allí cada uno es de un país diferente, cada uno de un idioma diferente, cada uno de una religión diferente, de una edad diferente, pero con respeto, con diálogo, y con mucha escucha, todos podemos aprender de todos, y es posible avanzar y encontrar puntos en común en medio de la diferencia.
Como escribió el hermano Alois en la carta de este año: “Aprendamos a reconocer en los otros los valores que Dios ha depositado en ellos y de los que quizás carezcamos nosotros. Tratemos de acoger su diferencia como un enriquecimiento para nosotros, incluso si comporta aspectos que de entrada nos desconciertan. Encontremos en los dones de los otros el frescor de una alegría”. He escogido estas palabras porque creo que deberíamos recordarlas cada vez que nos toque convivir con otros hospitaleros y con otros peregrinos que puedan hablar, opinar y actuar de manera diferente. Como dice el hermano Alois estas diferencias en el fondo son un regalo. Fue un regalo ir a Taizé, fue un regalo convivir con esa juventud tan variada pero tremendamente sana y alegre que allí acude, y esperamos ser portadores de esa armonía, de esa paz, y de esa confianza que se contagia en Taizé.
Los boletines de julio casi siempre son escuetos, vacacionales. Este no será distinto en lo relativo a noticias o comentarios. Pero además de informar de dolorosos adioses y de algunas convocatorias servirá para avisar que durante un breve espacio de tiempo–el que fue del 28 de marzo hasta el 18 de julio- atendimos a los peregrinos que llegaban a San Esteban de Leces, en el Camino de la Costa, mientras que el Ayuntamiento de Ribadesella cerraba el concurso para que algún particular lleve ese albergue. Doce hospitaleros tuvieron la bellísima oportunidad de atender en un albergue que tiene 20 años de vida y aunque nuestro compromiso con la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Ribadesella y el Ayuntamiento era finalizar cuando hubiera ya un nuevo gestor, a los que hemos estado implicados durante estos meses nos ha dado –nos está dando- mucha pena no poder seguir allí. Era lo que habíamos acordado. Gracias a Ribadesella por la oportunidad de dar a conocer en ese tramo del Camino cómo trabajamos Hospitaleros voluntarios.
Pero hay más: desde el 15 de julio estamos presentes en Alfaro, en el Camino del Ebro. La Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Alfaro ha puesto a disposición de Hospitaleros de la Federación el albergue, de titularidad municipal, para que atendamos a los peregrinos que lleguen a esta localidad riojana. Los hospitaleros que estén allí destinados tendrán que desarrollar la paciencia a la espera de los peregrinos que puedan llegar pero con el convencimiento que éstos estarán más que agradecidos por la presencia de voluntarios como nosotros en su marcha. Y quizá, sin tardar mucho, nos “establezcamos” en Puerto de Béjar, en la Vía de la Plata, donde la asociación de esta localidad está animada y decidida a establecer (el albergue está a la espera de equipamiento) un albergue para los peregrinos que transitan lugares tan elevados y que sea atendidos por Hospitaleros voluntarios como desea su ayuntamiento.
Convocatorias CURSOS PARA HOSPITALEROS EN 2018 Destinados a los hospitaleros veteranos con prioridad –en caso de haber muchas solicitudes- para los que fueron hospitaleros en 2017 o que nunca asistieron a un curso de veteranos. Pero serán bien recibidos también los nuevos hospitaleros de 2018, siempre que ya hayan sido hospitaleros. PEREGRINACIÓN POR EL VALLE DEL SILENCIO. 18, 19, 20 Y 21 DE SEPTIEMBRE Planteamos la actividad como una iniciación a la espiritualidad de la peregrinación, como una oferta para peregrinos a Santiago que quieren iniciarse en caminar con un sentido espiritual, con un acompañamiento espiritual, oracional y litúrgico que ayude a interiorizar y descubrir el sentido religioso que se esconde detrás del caminar con esfuerzo por la naturaleza.
Comenzaremos en Rabanal del Camino para seguir por Compludo, Peñalba de Santiago y San Clemente de Valdueza, acabando en Ponferrada. Se camina una media de 25 kilómetros diarios. Si estás animado, las inscripciones se harán por orden de solicitud. Las plazas son 15. Al ser un número reducido, tienen prioridad las personas que aún no han realizado esta peregrinación por el Valle del Silencio. El precio completo, alojamiento en albergues, comidas de ataque en el campo, cenas y desayunos en los pueblos lo realizaremos entre todos, calculando 100€ por persona.
Para inscribirse, desde el momento que leas el Boletín, y si tienes alguna pregunta o cualquier duda puedes escribirnos a la dirección de mail: allendelosmares@gmail.com Persona de contacto: Allende, teléfono y WhatsApp: 629 075 540
Nota bene: En el boletín relativo a septiembre informaremos ya de otros cursos para hospitaleros así como se hará la convocatoria para el Encuentro anual de Hospitaleros voluntarios… como cada año.
Buen verano a todos.Daniel Paniagua Díez